* La imagen original del Divino Niño fue robada hace como 8 meses, hoy hay otra representación, pero ambas imágenes, según narra la señora Rosario, no han permitido que se les ponga protección en su nicho, cada vez que se ha intentado, la protección se desprende misteriosamente.
Por Paty Aguilar
NoticiasPVNayarit.com
En la banqueta de la calle Melchor Ocampo de San José del Valle, en el domicilio número 32, hay un nicho que se construyó para albergar al Divino Niño, al cual se le atribuyen la realización de innumerables milagros y uno de ellos, fue precisamente el que le ocurrió a la señora, Rosario López Franco, o Mamá Chayo, como se le conoce en el barrio.
Ella, su esposo y sus 8 hijos, tres de ellos adoptados, llevan alrededor de 35 años habitando esta casa que desde hace 8 años resguarda el Divino Niño y es que hace 10 años a Mamá Chayo le practicaron una cirugía mayor y quedó en coma, pero aún en este estado de inconsciencia alcanzó a escuchar que un sacerdote le estaba dando la comunión creyendo sus familiares que en cualquier momento podría fallecer.
Según narra la señora Rosario, mientras estaba escuchando al sacerdote, ella se acogió al Divino Niño, al que le pidió de todo corazón le diera fuerza de vivir, no por sus hijos que parió, sino por sus hijos que no eran de ella “Nada más por ellos, porque me los pueden despreciar y te prometo que de limosna o como Dios me dé a entender, te pongo tu nichito en cuento yo esté bien.
En ese mismo rato yo, como a las dos horas empecé a abrir los ojos y a ver. Gracias a mi Dios volví, pero yo alcanzaba a escuchar que los médicos le decían a mi hija que solo un milagro me salvaba. Después los doctores le dijeron a mi hija que a qué santo le habían rezado para que le hiciera ese milagro y yo les dije que el Divino Niño y gracias a Dios y a Él, aquí estoy” dijo emocionada y segura de sí misma.
Comentó que ella pesaba 90 kilos y llegó a su casa casi desahuciada con un peso de 40 kilos “Y aquí estoy, llegué me recuperé y como Dios me dio a entender le hice su nichito hace como 8 años, estaba abajo en la calle, pero cuando hicieron la vialidad en concreto, me subieron mi nicho arriba y no le pasó nada, con una máquina lo subieron a la banqueta, ni se desbarató ni nada” recordó.
La primera imagen hecha en marmolina, la compró en la comunidad de Zacualpan, Compostela, donde se ubica la iglesia del Divino Niño, el cual es visitado por cientos de feligreses de toda la región el último domingo de cada mes. Pero esta imagen, le fue robada de su nicho hace como 8 meses porque no tenía puerta, comentó y añadió “la puertita se la hemos puesto y al otro día ya está tumbada, está caída. Se le pega a su nicho con cemento y al otro día la puerta está caída y esto ha pasado 4 veces” señaló.
Se le preguntó que significaba para ella el hecho de que el nicho no aceptara la puerta, así respondió “Para mí que a Él no le gusta estar encerrado, luego se lo volvimos a poner porque yo creí que ese material no le gustaba, le cambié de material y también le pusieron con chaquetes y todo eso y al segundo día igual estaba caída la puerta, entonces para nosotros él no quiere estar encerrado” concluyó.
Finalmente, comentó que la gente pasa a pie o sus carros o camiones y se persignan, asimismo le llevan veladoras y fotografías cuando hay personas perdidas, le ponen juguetes, pero la gente se los roba, si un dulce le ponen se los roban, lamentó tras agregar que la primera imagen fue robada hace como 8 meses, por tal motivo tuvo que reponerla. Cabe mencionar que en esta calle, eventualmente, se han realizado misas las cuales son muy concurridas, según señaló la señora Rosario.