A las 3 de la mañana, López Joya intentó por todos los medios pero no pudo que, Jesús Rodríguez Campoy le echara la mano, para librar a un detenido encargado de un sonido con evento a las 7 de la mañana
Por Mauricio Lira Camacho
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Felipe Javier Langarica Gutiérrez, tuvo 206 grados de albohol en su cuerpo, fue retenido en el operativo.
Dijo ser representante de un sonido, eran las 3 de la mañana cuando la detención.
A las 7 de la mañana del pasado sábado, debía participar en un evento de la especialidad del ayuntamiento, que preside Ramón Guerrero de Movimiento Ciudadano.
De inmediato comenzaron a sonar celulares, se trataba de buscar influencias municipales para que este joven saliera libre.
Era evidente su completo estado de ebriedad, no podía hablar y se puso en el momento de su retención, a entregar tarjetas de su empresa dedicada a brindar sonido en eventos, hoy con el ayuntamiento de Puerto Vallarta.
Transcurrieron varios minutos y llegó un promotor deportivo en el gobierno municipal de apellidos, López Joya.
Le pidió a Juan Villalvazo, encargado del operativo anti alcohol, implementado en avenida Francisco Villa y Fluvial Vallarta, que le echara la mano con Jesús Rodríguez Campoy, no pudo.
Sin acceso.
López Joya, presumió con identificación en mano ser promotor de deportes y trabajar en la administración con Juan Rincón, titular.
Hacía llamadas a todo mundo, pero no cuajaron.
Su preocupación era demasiada, pues tenían evento deportivo a las 7 de la mañana del pasado sábado, eran las 3 y el encargado del sonido, andaba retenido por haber manejado en estado de ebriedad.
¿Cómo le hacemos?, preguntaba una y otra vez.
“Consíguete otro sonido”, le recomendaban.
López Joya quien vestía una playera amarilla de los Leones Negros de la Universidad de Guadalajara, equipo en la liga de ascenso, lucía un short y su identificación.
Llegó al operativo en la camioneta oficial de la dependencia del consejo municipal de deportes, una unidad bastante maltratada, golpeada todo el costado del lado donde va el copiloto y la luz trasera sostenida con un pedazo de alambre.
Eran las 3 de la mañana.
De nada valieron las súplicas ante los agentes de tránsito para que hubiera una mediación con el titular Jesús Rodríguez Campoy
Fue la desesperación de Joya, para conseguir dinero y pagar la multa, urgía sacar al muchacho Langarica y garantizar que el evento saliera bien a 4 horas de realizarse en Puerto Vallarta.
Finalmente en un período de 30 minutos el dinero lo consiguieron y pagaron la multa, el joven no fue llevado a la cárcel, se lo llevaron a dormir un rato y a levantarlo a las 6 de la mañana para que el sonido estuviera listo, para el evento de las 7.