* A la fecha, se desconoce el fondo real por el cual ni siquiera han iniciado la pinta de edificios en La Aurora, como les prometieron
Por Mauricio Lira Camacho
Noticiaspv
La pregunta es, por qué no han iniciado la pinta de edificios en La Aurora.
Según promesa de hace varios meses, a la fecha los inmuebles sigue igual.
Prácticamente hace unas semanas todo estaba listo, para que se diera el banderazo inicial, para transformar este importante bastión en campañas políticas del municipio de Puerto Vallarta.
Hubo reclamos de vecinos quienes denunciaban hace dos semanas, que solamente les hicieron fiesta pero nada práctico en tareas de pintar añejos edificios de tan populoso asentamiento.
Los primeros indicios establecen que al parecer los pintores no tenían seguro social ni de vida, nadie quisiera alguna contingencia con cargo político.
Pero hoy, los comentarios van orientados hacia que ni a la fecha la parte baja de los edificios han comenzado a pintar.
Nada riesgoso.
En general el tema de la pintura y cambio de fachada en estas estructuras de vivienda, pareciera nada comparado con la proliferación de negocios adaptados en planta baja de departamentos, algunos puestos de venta de comida y jugos de reciente instalación en áreas verdes.
De la invasión de banquetas con bazares improvisados de ropa, de quienes políticos o no, han dejado mantas y anuncios de campañas y cuestiones laborales.
De los puesto de tacos que contienen tanques de gas, elevando los riesgos de contingencia alguna.
Esta semana, en tareas de limpieza en La Aurora, se incluyeron con mayoría de ciudadanos norteamericanos y pocos residentes, solamente trabajos de poda, pinta de espacio deportivo y recolección de hojarasca, pero nada referente a los edificios.
Estos trabajos convocados por la regidora de movimiento ciudadano, Susana Carreño, presidenta de la comisión de protección civil lo dedicaron solamente a un costado en espacio verde y de canchas deportivas.
Nunca se informó cuando el inicio de la pinta de edificios en La Aurora, en donde colonos siguen a la espera de cumplimiento de promesas.