* Prácticamente con el destino que dieron para uso de explosivos y la movilización de enormes camiones esta cancha volvió a ser dañada.
Por Mauricio Lira Camacho
Noticiaspv
Otra vez. La misma canción se repitió estos días, dañan espacios deportivos. En esta ocasión, debido al uso de explosivos que fueron para elaborar y en la presentación de castillos con fuegos en el marco del festival que concluye el día último de este año.
La pequeña cancha de fútbol, en uno de los extremos de la unidad deportiva, Agustín Flores Contreras, quedó prácticamente dañada en la parte central, ya que ahí se armaron algunos de los castillos.
Sus extremos también quedaron expuestos debido al constante movimiento de enormes camiones que transportaban pirotecnia.
A pesar de que el comisario de seguridad ciudadana y de vialidad en esta ciudad, Rogelio Hernández de la Mata, ordenó el destino de a,tunos elementos para resguardar la zona, de poco o nada sirvió, pues por lo,pronto este pasado fin de semana, las evidencias de maltrato estuvieron a la vista de todos.
La zona de la cancha y las contiguas igualmente para la práctica del balompié, fueron incluso acordonadas con vallas para impedir el paso de las personas y con el objetivo de tener seguridad. Pero fueron demasiadas las personas, quienes acudieron a esa parte de la unidad, para disfrutar de los castillos que hubo momentos en los que las vallas resultaron innecesarias.
Las canchas quedaron sumamente dañadas, no hubo partidos durante los horarios tradicionales de los juegos por las mañanas para los niños. No es la primera ocasión en las que quedan dañadas las canchas de fútbol, derivado de eventos ajenos al deporte.
Ya en el trienio del entonces alcalde, Javier Bravo Carbajal, esas canchas fueron habilitadas para la practica de fútbol de playa, sin haber cubierto los requisitos mínimos indispensables.
En otra parte de la unidad deportiva, Agustin Flores Contreras, concretamente en la cancha de béisbol, en el gobierno de Salvador González, fue habilitada para un cierre de campaña partidista dejando bastante dañado el césped y parte de la malla. También en esa parte, llegó el momento que fue usada como bodega para el almacenamiento de explosivos y fuegos artificiales con motivo de un festival local.