- Producto de la perseverancia y dedicación, así como el cumplimiento puntual de la ley en la materia, Francisco Villa y su familia, edificaron en el bosque tropical de Bahía de Banderas un Restaurant Spa cien por ciento ecológico con apoyo del gobierno federal, estatal y municipal. Esto demuestra que si se puede lograr proyectos productivos cuando se cumplen cabalmente las reglas de operación gubernamentales
Por Paty Aguilar
Constituido como una Unidad de Manejo y Conservación de la Vida Silvestre ante la SEMARNAT, el Rancho Vallejo “Encantado por la Naturaleza”, se convirtió en guarda y custodia de su entorno natural. En este predio enclavado en Bahía de Banderas, Nayarit, en la falda de la Sierra de Vallejo, guarida del jaguar, una especie en peligro de extinción, se construyó un Restaurant y Spa en medio de millares de árboles habilla o jabillo que crecieron en un radio de 10 hectáreas. Este complejo turístico opera en un cien por ciento de manera ecológica, bajo las normas que emiten las leyes en la materia de los tres niveles de gobierno.
Árboles, animales, piedras, hojas, frutos, y todo lo que produce la naturaleza en este lugar, está bajo el manejo y conservación de Francisco Villa, su esposa, Luz Victoria Meda y sus hermanos. Se trata de 110 hectáreas de tierra ejidal, un bosque tropical, donde el jaguar, el venado cola blanca, el jabalí, el tejón, el lagartijo cola azul, ardillas, y una variedad de aves, entre otros ejemplares, son las especies endémicas que habitan esta zona y que de pronto pueden ser observadas por quienes visitan el Rancho Vallejo.
También en esta zona durante los meses de junio a octubre, llegan las guacamayas que se alimentan del fruto del habilla o jabillo, transformando el paisaje en un gran colorido y algarabía, un espectáculo natural que se aprecia en temporada de lluvias, pero además, cuando las vainas de este árbol explotan, sus sonidos son un concierto musical en medio del bosque que siguen una armonía natural que sorprende y cautiva a quienes lo escuchan. Las hojas de este árbol, también sirven como alimento del ganado de este rancho, que por cierto, están fuera del área de conservación.
Sin embargo, durante todo el año, en el Rancho Vallejo se puede observar la vida natural a plenitud, caminando por senderos naturales, o bien en paseos a caballo, pero para experimentar y sentir este lugar a pie o a caballo, o bien disfrutar del Spa que cuenta con un Tenamaxcal, hay que hacer una reservación con tiempo anticipado. Pero diariamente, el restaurant ecológico, ofrece desayunos y comida con precios accesibles que se cocinan ante el comensal bajo normas ecológicas; una estufa inteligente precursora del Nixtenco, creada por la UNAM, donde se hacen tortillas a mano, pan al horno, y como combustible leña y sus cenizas, se utilizan para los sanitarios ecológicos, llamados secos por que no utilizan agua.
Para la sanidad del restaurant y del Spa, se cuenta con plantas de tratamiento ecológica que filtran el agua jabonosa, y al hacer uso de sus sanitarios, esos separan la orina y residuos fecales que a su vez son tratados bajo el esquema de composta para producir fertilizante natural, luego de que al residuo fecal en vez de echar agua, los usuarios del sanitario le echan la ceniza que produce el Tenamaxcal y la estufa ecológica. El fertilizante producido posteriormente se utiliza como nutriente de las plantas y árboles del entorno. Se trata pues, de un paraíso ecológico que se puede disfrutar sin culpa, porque el impacto del hombre a la naturaleza es mínimo.
El Spa cuenta con salas de masaje relajante, desintoxicante, sport y energético, en este último no se toca el cuerpo, la terapeuta, que es la esposa de Francisco Villa, se conecta con la energía del universo y con esta energía se da el masaje. Se trata explicó Victoria, de abrir la conciencia con este tipo de masaje porque el cuerpo humano es energía y es parte del Universo. Agregó que a veces las personas llegan a sentir algo con este masaje, pero otras no, sin embargo, siempre la conexión energética se logra y se transmite al cliente. Los ajustes quiroprácticos, también se realizan en estas salas de masaje.
A un costado de estas salas, hay un Tenamaxcal donde bajo terapia de sudoración se purifica el cuerpo en un entorno seguro y guiado por expertos. Al centro del Tenamaxcal se colocan piedras volcánicas al rojo vivo que al remojarlas emiten vapor tras colocar encima de esta rocas hierbas aromáticas, y alrededor de ellas, se sientan las personas que inmediatamente empiezan a sudar y exhalar, hasta que su cuerpo libera toxinas, posteriormente se da un baño de agua fría en una pileta especial para tal fin. Todo lo anterior se realiza en un ambiente donde solo se escucha el sonido de la naturaleza; aire, el cantar de las aves, el tronar de los árboles y el caer de las hojas.
Cabe destacar, que en este lugar se utiliza energía solar y cuanta con un mirador de aproximadamente 30 metros de altura desde donde se divisa la bahía, el valle y la sierra de esta parte de la Riviera Nayarit. Como segunda parte de este desarrollo turístico, se construirán bungalows ecológicos. Vale pues la pena visitar este paraíso ecológico, para llegar ahí, hay que pasar la comunidad de San Juan de Abajo, y a escaso dos kilómetros, hay señalamientos que llevan hasta este lugar del lado de la Sierra de Vallejo. Desde San Juan de Abajo, se hace un recorrido en vehículo de aproximadamente 15 minutos hasta llegar al Rancho Vallejo Encantado por la Naturaleza, reza su slogan.
Este desarrollo turístico ecológico es producto de la perseverancia y dedicación, así como el cumplimiento puntual de la ley en la materia. Francisco Villa y su familia, edificaron en el bosque tropical de Bahía de Banderas un Restaurant Spa cien por ciento ecológico con apoyo del gobierno federal, estatal y municipal. Esto demuestra que si se puede lograr proyectos productivos cuando se cumplen cabalmente las reglas de operación gubernamentales.