Locatarios y empresarios de diversos giros, presionan al gobierno municipal, para que restringa la presencia de vendedores ambulantes y puestos semifijos en el malecón
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Una vez que el malecón fue abierto a la población, los empresarios siguen presionando al gobierno local, para que restringa la presencia de vendedores ambulantes y la instalación de puestos semifijos.
Este medio, realizó un recorrido por el malecón y se percató que hay una rotación de vendedores de diversos productos, como algodones, globos y la tuba.
Pero son rechazados por los comerciantes del área del malecón, recién inaugurado.
Y en la parte del malecón ampliado lo que se nota es la instalación de puestos semifijos sin orden, y se refieren a la venta de cremas, hot dogs y alimento rápido.
Además, de los vendedores de alpaca y de diversos productos, ambos puntos del malecón contrastan.
Por un lado, el malecón desde el hotel Rosita hasta los arcos, la parte light y del ampliado a olas altas, con mayor presencia de puestos y vendedores.
“Un tianguis que no presenta buena imagen al turismo norteamericano, canadiense y europeo principalmente, que son quienes verdaderamente consumen”, dijo en charla un mesero de un local de la zona en el malecón ampliado.
Hasta donde se sabe, los vendedores de globos, algodones, de alpaca y otros productos trabajarán de manera alterna, pero los puestos semifijos, se quedan con todo y sus estructuras lo que rompe con el molde de lo que se pretende en el malecón.
Varios encargados y dueños de locales, sobre el malecón afirman debe regularse la presencia y re distribución de los vendedores ambulantes y una mejor presentación de los puestos semifijos.
Cabe destacar que fueron los vendedores ambulantes de diversos productos, los que tienen la incertidumbre acerca de la ubicación que tendrán una vez que terminen el malecón.
Se entrevistaron con el presidente municipal, Salvador González, y a pesar de que tienen la promesa de que todo será igual, tienen sus reservas.
Se trata de varios vendedores que por años, tienen en el centro de la ciudad su base de trabajo, pero que por cuestiones de obra, fueron enviados a otras zonas dentro del primer cuadro de la ciudad.
Transcurridos más de 4 meses, y viendo el avance de la obra, inquietos, se organizaron para solicitar información de la autoridad municipal.
Para José Luis de Jesús Florentino, vendedor de dulces y botanas, desde hace 8 años hoy más que nunca hay incertidumbre, por lo que pueda pasar.
Recordó que ya hace tres años, a otros trabajadores del malecón, como lo son pintores fueron reubicados al puente del río Cuale.
O de los artistas que fueron reubicados a otras zonas con todo y sus esculturas y están en el mismo proceso de no saber a ciencia cierta, en qué lugar quedarán.