Postura inicial que fue planteada en la XXXVIII, conferencia de la CONAGO, celebrada en Morelia en marzo del 2010
Por Mauricio Lira Camacho
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El secretario técnico de la CONAGO, Rodolfo García, refrendó en Puerto Vallarta, la propuesta para la creación de mandos policiales únicos, tanto en las 32 entidades federativas como una federal, para combatir al delito en el país.
Lo anterior dijo en el marco del Foro Internacional “Hacia un Modelo Policial para el México del Siglo XXI”, que se celebra en Puerto Vallarta, Jalisco.
Cabe destacar que la Confederación Nacional de Gobernadores, CONAGO, fijó en el mes de marzo de este año, su postura en la convención número XXXVIII, celebrada en Morelia, en la que se propuso la creación de los mandos policiales únicos.
En el Marco del Foro Internacional “Hacia un Modelo Policial para el México del Siglo XXI”, Rodolfo García, secretario técnico de la CONAGO, refrendó el planteamiento ante autoridades municipales, estatales y federales reunidos en Puerto Vallarta.
Al hacer uso de la voz, dijo, que en el acuerdo séptimo de XXXVIII convención de la CONAGO estableció que en apoyo a las tareas de seguridad en el país, con relación a la creación de los mandos únicos policiales, se da el pronunciamiento en el que la seguridad social, con toda razón es algo permanente que demanda la ciudadanía.
Lo anterior ante los altos índices de criminalidad, que aquejan al país, los delincuentes quieren amedrentar a todos, gobierno y sociedad.
Debemos pasar de la indignación a la solución de los problemas.
México es un país de gran tradición con una cultura viva, orgulloso de su raíz y que históricamente ha defendido la soberanía.
A fin de consolidar una patria donde prospere la seguridad y bienestar.
Por eso, hoy no podemos seguir perdiendo contra la delincuencia organizada, y la criminalidad, se convierten en males endémicos, que afectan el tejido social e individual de los mexicanos al grado de que hay un daño irreversible.
Estamos obligados a responder con mayor decisión, a compartir por todos los medios a combatir a los delincuentes que agreden, la sociedad y vulneran las bases mismas de la convivencia.
Estamos y enfrentamos una verdadera crisis de seguridad nacional y hechos de barbarie, que rechazamos de manera categórica.
Es claro que la actual situación de la seguridad pública federal, favorece la desarticulación con esfuerzos inconexos, a respuestas aisladas.
Así ganen terreno los pocos criminales, carentes de escrúpulos contra un pueblo mexicano pacífico y trabajador.
No podemos cerrarnos a las evidencias y debemos cambiar lo que no ha funcionado, al crimen organizado es necesario combatir con una fuerza unificada y una sociedad participativa que impulse la coacción denuncia.
Esto implica que renovemos de manera gradual, el modelo policial, a fin de que este responda con efectividad, oportunidad a actual problemática que vive el país.
Lograr una sociedad con armonía es interés común de los tres niveles de gobierno, por lo que la integración de los cuerpos policíacos, en uno sólo bajo el mando de la coordinación federal, atendiendo las particularidades legales de cada una de las jurisdicciones se convierte en una necesidad imperiosa para trabajar en el combate a los delitos de fuero común, y con ello a contribuir a la mejor sociedad de manera estructural, y a un mejor manejo de los recursos financieros, materiales y humanos de cada ente.
Por lo que la CONAGO se pronuncia por manifestar su posición en el sentido de crear mandos policiales únicos en cada una de las 32 entidades federativas.
Que se inicien las discusiones necesarias entendiendo las reformas imperantes en los tres niveles de gobierno.
Presentar una sugerencia al congreso de la unión, para que en uso de sus facultades, derive y resuelva sobre la conveniencia de reformar el lado constitucional correspondiente.
Para crear en cada estado del país, y una policía única capaz de responder con mayor eficacia, profesionalismo y prontitud, ante los inaceptables desafíos del crimen.
Realizar en su caso las adecuaciones al marco legal de cada entidad, siempre con respeto.
Así como una distribución equitativa de los recursos en materia de seguridad a los estados y municipios, concluyó.