Será hasta este fin de semana, cuando se espera la realización de una reunión de autoridades, para informar y atender casos de indigentes en el municipio
Por Mauricio Lira Camacho
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Mientras dependencias gubernamentales, continúan tratando de organizar una reunión digna, sobre indigentes, estos inundan las calles y banquetas en Puerto Vallarta, principalmente en el primer cuadro de la ciudad.
Creando un problema social grave, primero de falta de seguridad para quienes necesitan ayuda y asistencia social.
Segundo, por las consecuencias que de ello se van originando, quedando en último lugar, lo que se considera una mala imagen visual para el destino.
Diariamente es común observar a personas débiles visuales, de la tercera edad, vendedores de todo tipo, y de quienes piden limosna en las calles, en condiciones bastante deplorables.
A la fecha, ni el sistema para el desarrollo integral de la familia, DIF y el área de reglamentos han informado de operativos que hayan realizado, para atender esta problemática.
Cabe destacar que la indigencia ha sido uno de los grandes flagelos considerados dentro de cualquier sistema social.
Conjuntamente con el hambre, la marginalidad, el desempleo, el analfabetismo, la violencia y la guerra, entre otros la indigencia constituye una de las grandes calamidades sociales que indudablemente contribuyen a la negación de la vida digna, larga y saludable del ser humano, dicen los estudiosos.
Por esto se considera como un área de gran importan en el mundo tanto para las instituciones públicas, privadas así como también para las organizaciones no gubernamentales a nivel mundial.
Por otra parte, tiene una posición relevante a nivel de la investigación e intervención dentro de las ciencias sociales y médicas.
Indiscutiblemente, la pobreza continúa siendo el más grande desafío que enfrentan las naciones del mundo.
De hecho, constituye uno de los ocho grandes objetivos establecidos en la declaración del milenio: rebajar la pobreza a la mitad para el año 2015. Según el banco interamericano de desarrollo (BID), existen 220 millones de personas pobres en Latinoamérica y de esos un 40% están viviendo en la indigencia.