* Ella no sabía de revanchismos, de partidos políticos, de rencores. Era pues, un alma caritativa, ejemplar, a quien siempre recordaremos con amor, cariño, respeto y mucha, mucha, pero mucha admiración. Así describió atinadamente a la señora Martha Robles García, el compañero periodista, Roberto Cervantes.
Por Paty Aguilar
NoticiasPVNayarit
Este domingo 25 de enero 2015, se llevaron a cabo los servicios fúnebres de la Señora Martha Margarita Robles García de Paniagua, quien fuera presidente del DIF Municipal de Bahía de Banderas en dos ocasiones durante las administraciones municipales que presidio su esposo, contador, Héctor Miguel Paniagua Salazar. El cortejo salió del domicilio de la familia en San Juan de Abajo en su último recorrido por las calles que vieron nacer a la señora Martha Margarita, hace 62 años un 21 de diciembre de 1952.
En silencio y lentamente familiares, amigos y ciudadanía en general, la acompañaron hasta su última morada en el panteón de la comunidad. Al llegar al Campo Santo un buen grupo de personas formaron una valla humana para recibirla y darle el último adiós, fueron momentos muy emotivos y dolorosos. La señora Martha Margarita, fue despedida como se lo merecía, con mucho respeto, admiración y afecto de parte de quienes asistieron al sepelio.
“Ella no sabía de revanchismos, de partidos políticos, de rencores. Era pues, un alma caritativa, ejemplar, a quien siempre recordaremos con amor, cariño, respeto y mucha, mucha, pero mucha admiración” Así describió atinadamente a la señora Martha Robles García, el compañero periodista, Roberto Cervantes.
Efectivamente, la Señora Martha Robles de Paniagua, brilló con luz propia, la personalidad de su esposo, el ex alcalde, Héctor Paniagua Salazar, no le hizo sombra. Ella siempre fue vista por la ciudadanía de manera independiente, ella se ganó el cariño y afecto de todos porque jamás hizo distinción de personas, a todos, sin excepción, brindó un trato cordial, amoroso, siempre con su sonrisa amable dibujada en su rostro durante sus gestiones como Presidenta del DIF Municipal.
Le sobreviven sus hijos, Nadia, Héctor y Alejandra y su esposo, contador, Héctor Miguel Paniagua Salazar.