Hechos registrados el 31 de agosto 2010; desapareció un taxi, falleció una persona y se registraron hechos misteriosos que hasta la fecha no han tenido respuesta. Aparecieron rostros extraños en el vidrio lateral de la puerta de una unidad de rescate de Protección Civil de Bahía de Banderas
Por Paty Aguilar
Este domingo 31 de agosto se cumplen 4 años de aquél fatídico día, martes 31 de agosto del 2010, cuando perdió la vida un joven que viajaba junto a su novia a bordo de un taxi de Puerto Vallarta que venía a Bahía de Banderas alrededor de la una y media de la mañana. Al pasar sobre el puente del Río Ameca se desprendió una de sus placas y junto con el taxi cayeron a la fuerte corriente del gran caudal que en ese momento llevaba el río; el conductor y la joven muchacha lograron salvar su vida, pero su novio no, fue encontrado días después flotando en el mar a la altura de la playa Destiladeras. Fue una noticia que sacudió y conmovió a toda la población tanto de Bahía de Banderas como de Puerto Vallarta, pero también se convirtió en noticia nacional e internacional.
Los cuerpos de rescate de ambos destinos turísticos de inmediato se abocaron para buscar a los viajeros entre las sombras de los matorrales aledaños al río, fue entonces que fue localizada la joven quien tiritando de frío estaba abrazada a un tronco a escasos tres metros de la orilla desde donde fue rescatada por elementos de Protección Civil de Bahía de Banderas, mientras que minutos antes, del lado de Puerto Vallarta, protección Civil informó que el taxista ya estaba a salvo, salió a la orilla nadando, sin embargo, entre la confusión del hecho, testigos presenciales que iban en vehículos atrás del taxi, aseguraban que habían caído más vehículos, por lo que la búsqueda siguió toda la noche y día de ese 31 de agosto y como tres o cuatro días más de manera intensa.
Sin embargo, casi 24 horas después, alrededor de las doce de la noche, sucedió algo que puso de los nervios de punta a los elementos de Protección Civil de Bahía de Banderas que en ese momento estaban a cargo del comandante, José Luis Martínez; uno de los rescatistas, el oficial Arvizu, que en ese momento estaba descansando en el vehículo de rescate, al mirar sobre el vidrio de la puerta lateral del lado del copiloto, descubrió varios rostros misteriosos que repentinamente aparecieron, los observó detenidamente sin encontrar una explicación lógica de lo que estaba mirando, fue entonces que decidió dar parte del hecho a su superior. La unidad estaba parada en el macromodulo de seguridad de Jarretaderas a un costado del Río Ameca, en vidrio se formaron claramente cinco rostros; tres varones y dos mujeres.
Con el fin de buscar explicaciones de lo que estaban viendo, se pidió a soldados y policías estatales que también estaban participando en la búsqueda de más personas en el río, para que fueran testigos de los hechos. En ese momento se generaron comentarios de toda índole, incrédulos y desconfiados, señalaron que alguien de los bomberos los había plasmado, sin embargo, luego de observar detenidamente los rostros concluyeron que esto no era imposible, ya que la nitidez y perfección de las líneas eran realmente asombrosas. Cuando llegamos al lugar, como parte del seguimiento informativo sobre los sucesos ocurridos en el Río Ameca, observamos a los elementos de seguridad perturbados, buscando explicaciones a lo que estaban viendo.
Fue tal el impacto en ellos, que el comandante Martínez interpretó la aparición de estos rostros en su unidad como una señal de que las personas desaparecidas en el Río Ameca le estaban pidiendo que las buscara. Es por ello, que luego de que los rostros fueron observados por todos, decidió realizar un recorrido por la Riviera del río con la esperanza de encontrar a los desparecidos.
Logramos tomar unas fotografías de estas imágenes, sin embargo, fue difícil captar todos los rostros en una sola toma, fue necesario realizar varias para vida de lograr captarlos ya que en ese momento estaba cayendo una pertinaz llovizna. En esta ocasión, nuevamente traemos al presente esas imágenes que hasta ahora no se ha podido explicar cómo fue que esos rostros aparecieron en el sudado vidrio de una unidad de rescate de Protección Civil de Bahía de Banderas.
Cabe mencionar, que en aquel entonces, quien era director de Protección Civil, José de Jesús Fregoso, entrevistado al respecto, se mostró impresionado luego de que vio los rostros cuando el comandante Martínez le informó sobre dichas apariciones “es increíble, lo veo y no lo creo, se trata de algo que no tiene explicación” dijo.
La noticia en su momento causó revuelo, incredulidad, pero las imágenes quedaron plasmadas, los hechos sucedieron y no había evidencia alguna de que alguien las podría haber puesto ahí, ya que la patrulla en todo momento estuvo trabajando en la búsqueda de sobrevivientes y a la vista de todos los que participaron en el rescate incluidos los reporteros. La noticia atrajo al equipo de producción del popular programa Extranormal de TV Azteca.
El equipo del programa Extranormal de TV Azteca, la tarde del lunes 18 de octubre 2010, llevó a cabo entrevistas con los testigos, incluida esta reportera, el director de Protección Civil, Jesús Fregoso, el comandante, José Luis Martínez, la sobreviviente del trágico accidente donde perdió la vida su novio, Erika Olivia Martín del Campo, así como otras personas que estuvieron presentes el día los hechos, con el fin de preparar un programa televisivo donde participan investigadores de lo paranormal y psíquicos, quienes podrían dar algunas respuestas a lo que esa noche sucedió.
Cabe mencionar, que ese día por la noche, también se grabó un ritual con la sobreviviente junto a la corriente del Río Ameca donde fue rescatada, ahí se liberó la fotografía de la persona que falleció ahogada, ya que Olivia tuvo manifestaciones de su novio, lo cual, también llamó la atención de este equipo de investigadores que se especializa en hechos paranormales.
Dichas entrevistas las llevó a cabo la reportera, Alejandra Carbajal, acompañada por los camarógrafos, Rubén Soto, Raúl Landin, así como por Carlos Ireti Hernández Reyes y Engelberto Contreras, corresponsables de TV Azteca en Puerto Vallarta y Bahía de Banderas en aquel entonces.