* El fotógrafo del CDE del PRI, era Emiliano Pozas Uturbe, quien fue sacado de su domicilio el pasado viernes por la noche, junto con su suegro, Carlos Palacios Aguirre, y quien también amaneció acribillado. Del resto de los identificaron había un maestro y varios indígenas del poblado de Rosamorada.
Por la Redacción de NoticiasPVNayarit.com
Tras le ejecución de las nueve personas, encontradas sobre la carretera Tepic- Aguamilpa el pasado sábado 20 de agosto del 2011, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Nayarit, confirmó los nombres de los occisos, donde destaca la persona de quien en vida llevó el nombre de Emiliano Pozas Iturbe de 30 años de edad, el cual se desempeñaba como fotógrafo oficial del Partido Revolucionario Institucional de Nayarit.
Junto con Pozas Iturbe, fue secuestrado su suegro, Carlos Palacios Aguirre; ambos los sacaron con lujo de violencia de su domicilio, ubicado en la colonia Valle de Matatipac, para posteriormente aparecer ejecutados con el resto de las personas, que ya fueron identificadas por sus familiares.
El comunicado de la PGJE, refiere que entre los acribillados estaba un profesor, un menor de edad y algunos indígenas.
Las personas asesinadas respondían a los nombres de:
- José Marcos Flores Flores 18 años de edad
- Bonifacio Lobatos López 35 años
- Isidoro Carrillo Muñoz de 23 años
- Gerardo Lobatos de la Cruz de 23 años de edad, (indígena)
- Adán Noé de 17 años de edad
- Santiago Rodríguez Ceferino de 21 años
- Heleno Ceferino Ortiz de 41 años de edad
- Emiliano Pozas Iturbe de 30 años de edad
- Carlos Palacios Aguirre de 48 años de edad
Respecto a los seis hombres identificados, se confirmó son indígenas, y entre ellos estaba un menor de edad, quien fueron privados de su libertad durante la noche del viernes pasado por un grupo armado, según revelaron los familiares de las víctimas a las autoridades, lo mismo ocurrió con el fotógrafo y su suegro, Palacios Aguirre.
Sobre la muerte del fotógrafo, la sociedad de periodistas de Nayarit se encuentra consternada por esta situación, además de que aseguran quienes lo conocieron era un hombre amable, no tenía problemas con nadie y era muy atento con el resto de los compañeros de los medios de comunicación.
Incluso diarios estatales de Nayarit, consideran que la muerte de Pozas Iturbe no era para terminar de esa manera, ya que lo conocían como buen compañero, buen esposo y buen padre.