* A la fecha, se han encontrado alrededor de 7 escrituras del lote 20 de Nuevo Vallarta, actualmente, está como garantía por un préstamo con Banco INMBURSA de Carlos Slim por 9 Millones de Dólares. Funcionarios públicos encubren los actos de corrupción, se niegan a investigar, señala, Giovanni Zivoli. Autoridades aseguran que el Decreto Expropietario ya no tiene valor y tampoco el Plano Original de Nuevo Vallarta S.A de C.V.
Por Paty Aguilar
NoticiasPVNayarit
El lote 20 de Nuevo Vallarta es área pública, es patrimonio del municipio, pero el alcalde de Bahía de Banderas, José Gómez, el Jurídico del IX Ayuntamiento, Fredy Bernal, el director de Desarrollo Urbano, Joao Zayas y los funcionarios del FIBBA, se niegan a investigar los hechos para rescatar este valioso predio ubicado en el fraccionamiento Náutico de Nuevo Vallarta, así lo denuncia el empresario, Giovanni Zivoli, luego de que en diversas ocasiones se ha entrevistado con los antes mencionados hasta que finalmente, Joao Zayas, le dijo que el decreto de expropiación y el plano original de Nuevo Vallarta ya no tenía validez.
Como se informó de manera oportuna, este lote 20 durante mucho tiempo estuvo sin construcción, sin embargo, aunque estaba bardeado por una malla, hace algunas semanas por parte del hotel aledaño, Hard Rock, se empezó a construir un estacionamiento, lo cual fue denunciado por Giovanni Zivoli, ante el IX Ayuntamiento, motivo por el cual fue suspendida la obra, pero luego se quitaron los sellos y finalmente se les otorgaron los permisos porque cuentan con escrituras y realizaron sus trámites correspondientes, según notificó, Joao Zayas, al empresario, Giovanni Zivoli.
Y es que el empresario, Giovanni Zivoli, se ha dado a la tarea de buscar que se rescate este lote público que según plano original de Nuevo Vallarta, se utilizaría como Club de Playa, es decir, un acceso al mar el cual, fue vendido por FIBBA luego de que de manera arbitraria dicho plano fue modificado dentro del famoso Plan Parcial de Nuevo Vallarta, el cual sirvió también para que otros empresarios, como Graciano Sovernigo Cavalin, compraran retornos que eran accesos al mar, con lo cual prácticamente las playas de Nuevo Vallarta quedaron semi privatizadas, comenta Zivoli y agrega, que el FIBBA no encuentra la escritura de la primera venta, sin embargo, esta primera venta aparece como antecedente en contrato de compra venta de dicho lote 20 entre Sierra Vallarta S.A de C.V y Inmobiliaria Puerto Bonito S.A de C.V, con fecha 8 del 10 de mayo 208 ante el notario público, Teodoro Ramírez Valenzuela.
Sin tomar en consideración los intereses colectivos de la ciudadanía de Bahía de Banderas, además de los inversionistas locales y extranjeros que compraron de buena fe predios en el Desarrollo Náutico de Nuevo Vallarta a partir de su promoción hace alrededor de 45 años, en el año 2001, sin consultar, de manera arbitraria, funcionarios estatales y municipales de ese entonces, en contubernio con empresarios hoteleros como Graciano Sovernigo, respaldado entonces por Héctor Paniagua Salazar, que fungía como hombre de confianza de Graciano Sovernigo y las argucias del arquitecto, Ernesto del Castillo, que también trabajaba para este empresario, se elaboró el Plan Parcial de Nuevo Vallarta, con lo cual se modificó el plano original, cuando era presidente municipal, Luis Carlos Tapia y el gobernador, era, Antonio Echavarría»
«Así fue como se fraguo el robo de las áreas públicas de Nuevo Vallarta que fungían como accesos al mar y que el FIBBA posteriormente, los vendió a este empresario italiano, se trata de retornos que daban al mar y otras áreas públicas que actualmente están en manos de Graciano Sovernigo, como el lote 11 que estaba destinada a ser un parque público y también la calle del muelle que da al canal aledaño a la plaza Pueblito Paraíso, entre otras áreas públicas que fueron aprovechadas por otros desarrolladores que compraron estos predios al FIBBA.
Con estas acciones, asegura, Giovanni Zivoli, se perdió el interés de invertir en la zona por otros empresarios hoteleros. A esto se agrega el abandono de la poca infraestructura que se alcanzó a construir, porque hasta la fecha, este fraccionamiento supuestamente exclusivo, no se ha concluido su construcción. Los canales no se han dragado en estos 45 años, están contaminados, el manglar se dejó crecer e invadió zonas donde se tenía contemplado construir los malecones de 20 metros de ancho en todos los canales de Nuevo Vallarta.
Como resultado de estos atropellos, abusos y una alta corrupción, ahora Nuevo Vallarta está a la venta, el 80 por ciento de los inversionistas abandonaron el área, sus predios están a la venta, predios que nadie quiere comprar porque están devaluados y la certeza de desarrollo es prácticamente nula.
Se sabe que muchos de estos inversionistas, como por ejemplo, Condominios LUMA, abandonó su proyecto de construir 8 edificios, solo construyó dos y se fue a invertir a otros destinos turísticos. También Tahema, de Montreal, Canadá, abandonó a casi 200 compradores por el problema de los accesos al mar, los retornos, que para entonces estaban ya en manos de Graciano Sovernigo, gracias a las argucias de los antes mencionados.
Por otra parte, los lotes 3, 4, 5, y 6 de la avenida Cocoteros Villa 8 que abarcan casi un kilómetro de frente y colindan con los canales de Nuevo Vallarta, desde hace casi 40 años permanecen en completo abandono, el FIBBA prácticamente no le mete mano porque hay un completo desorden en la administración de este Fideicomiso.
El empresario, Giovanni Zivoli, hace un llamado, un exhorto al gobernador, Roberto Sandoval Castañeda, para que atienda el problema que aqueja al FIBBA para que se destraben los asuntos que lo tienen paralizado, esto con la finalidad de que Nuevo Vallarta se desarrolle tal y como fue planeado hace 45 años y que además, haga valer el Decreto Expropiatorio que se publicó alrededor de 1970, porque el abandono no crea trabajo que tanto necesitan los nayaritas en esta región, en esta Riviera Nayarit, en este destino turístico que tanto potencial tiene, señala el empresario, finalmente.