Vecinos , comerciantes y empresarios, denuncian que en Reglamentos Municipales, “ahora nos hacen culpables”, por el excesivo ruido que con 8 bocinas Mangos Beach Club, contamina auditivamente todo el día
Por Mauricio Lira Camacho
NOTICIASPV
Reglamentos, culpable.
Vecinos, comerciantes y hoteleros de la colonia 5 de Diciembre, responsabilizan al área de reglamentos que hoy encabeza Jorge Antonio Quintero Alvarado, en sustitución de Macedonio León, por los constantes días con exceso de ruido en el negocio denominado “Mangos Beach Club”, acrecentado por la visita de springbreakers y ante la inminente llegada de la temporada de semana santa.
Quejosos denuncian que este negocio el cual tiene licencia para operar como restaurante cuenta con 8 súper bocinas, 6 de las cuales están en la playa y 2 en el interior en las que se satura de sonidos bajos a exceso de volumen, lo cual es molesto.
Lo más grave ahora, según denuncia María Isabel Calderón Ramírez, vecina e inversionista en la zona, hay operadores de cabina en Reglamentos quienes los hacen sentir culpables de lo que pasa.
Hay un operador, dijo, de nombre “Juan”, quien cada vez que contesta el reporte de los denunciantes, responde “otra vez usted”, “el ruido es tolerable” y otros comentarios que están fuera de lugar.
“Ahora resulta que nosotros somos molestos para algunos servidores públicos de esa dependencia, se trata de las veces que denunciamos por teléfono cuando hay exceso de ruido.
Asegura la quejosa, así como el residente de origen italiano, Paolo Treezi, que la calma desde hace 9 años no existe en esa zona.
El tiene años de residir en esta zona y el clima ha cambiado de calma total a desenfreno diario por la música.
Día y noche es demasiado ruido, y la autoridad poco o nada hace, aunque destacaron que con movimiento ciudadano han avanzado.
Hizo eco el gobierno luego de las acusaciones que en contra de funcionarios municipales fueron hechas por aparente proteccionismo.
Fueron los casos del actual procurador social municipal, Juan Hernández y del secretario particular, Oscar Pérez.
Al parecer, dijo la denunciante, protegían al anterior dueño del restaurante.
Hoy ya es otro dueño, “no tenemos nada contra él pero es una molestia estar lidiando con el ruido en exceso y la acción del área de reglamentos, hoy no sabemos cómo se va actuar con la llegada de un nuevo titular en la persona de Jorge Antonio Quintero Alvarado”.
Por su parte, el residente de nacionalidad italiana radicado aquí, señaló es pensionado y ya no puede descansar, “a eso vine a Puerto Vallarta”.
Otros inversionistas han señalado que sus huéspedes en los hoteles adjuntos o muy ceca de Mangos Beach Club, ya no desean regresar debido al excesivo volumen con que este lugar tiene su música grabada que expanden en 8 bocinas o cuando presentan música en vivo, muchas veces con banda.
“Aquí no pasa nada”, dicen quejosos.
Ahorita la queja es por la presencia de springsbreakers, lo cual dicho por Isabel Calderón, es “su mercado natural de Mangos Beach a ellos eso les venden”.
Pero ahora el temor es que ante la opacidad de reglamentos, habrá desorden y contaminación auditiva por exceso de ruido con ocho bocinas potentes de Mangos Beach Club, para la próxima temporada vacacional de semana santa y pascua.