Murió en cumplimiento de su deber; ¡Adiós a Juan Carlos Cázares!

* ¡Juan Carlos Cázarez López! ¡Presente! Con un pase de lista, sus compañeros de Protección Civil de Bahía de Banderas dieron su último adiós en su sepulcro. Su esposa e hijos, amigos y familiares, entre llanto y canciones que le gustaban a Juan Carlos, lo dejaron ir. Juan Carlos es mártir, dijo el sacerdote durante la Misa de Cuerpo Presente.

Por Paty Aguilar
NoticiasPVNayarit

La mala noticia del 6 de abril 2015, consternó a la ciudadanía de Bahía de Banderas y Puerto Vallarta; un convoy de la Fuerza Única de Jalisco, fue emboscado por un grupo criminal sobre la carretera Mascota-Puerto Vallarta, fallecieron 15 elementos efectivos, entre ellos, Juan Carlos Cázarez López, originario de Bucerías. Su familia; madre, esposa, hijos y hermanos, fueron sacudidos por el dolor. Luego de reconocer su cuerpo en la Fiscalía General de Jalisco, en la ciudad de Guadalajara, su cuerpo inerte les fue entregado y fue recibido en su domicilio en la comunidad de Bucerías, la madrugada de este miércoles 8 de abril donde fue velado.

A las dos y media de la tarde de este jueves 9 de abril, a petición de su madre, sus ex compañeros de Protección Civil, en un carro bomba trasladaron su féretro hasta el restaurant de su familia ubicado sobre la carretera 200 contra esquina de TELMEX, donde bomberos y paramédicos, hicieron guardia junto a su ataúd al igual que familiares y amigos de Juan Carlos. Yolanda su esposa, desgarrada por el dolor, colocó suavemente sobre su féretro una fotografía de Juan Carlos, en tanto que sus hijas, Carla Eugenia de 17 años y Yolanda de 11 años de edad, estaban inconsolables al igual que la madre de Juan Carlos, señora María de la Luz López, quien en varios momentos requirió el apoyo de su familia ante tan grande dolor de ver a su hijo mayor sin vida.

Ya en la Iglesia, el padre Parra, durante la Homilía, pidió oración por todos los policías caídos en el cumplimento de su deber y sus familias que están sufriendo las consecuencias de este acontecimiento, dijo el padre. Todos ellos son mártires, Juan Carlos es mártir, dijo el sacerdote, como Jesús, por ello, dijo, debemos de seguir la enseñanza de Jesús en su Muerte y Resurrección amorosa y no pensar en la venganza.

Luego del término de la Santa Misa, al salir el ataúd de la iglesia cargado por los compañeros de Juan Carlos, se escuchó el ulular de las unidades de Protección Civil que lo acompañaron hasta el panteón de la Cruz de Huanacaxtle.

Ante la tumba abierta para recibir el cuerpo de Juan Carlos, su hija Carla Eugenia se aferró a su féretro sin poder dejar de llorar abrazando y besando a su padre mientras una banda de música cantaba las melodías que más gustaron a su padre, canciones que Carla sabía le gustaban a su padre, por lo que ella estuvo pidiendo las tocaran al igual que su madre. Fueron momentos de mucho dolor, conmovedores y llenos de gran tristeza; ver a sus tres hijos abrazados de su padre, conmovió a hombres, mujeres y niños que los acompañaron en su gran pena.

Que en paz descanse, Juan Carlos Cázarez López, un funcionario público que sirvió a la ciudadanía día a día, como bombero en Bahía de Banderas, como policía municipal en Cabo Corrientes y como policía de la Fuerza Única de Jalisco donde perdió su vida en el cumplimiento de su deber.