Hay un monopolio de turistas por parte de los hoteles que tienen Tiempo Compartido, los vendedores les informan que hay inseguridad en las calles, les indican que tengan cuidado y el temor los hace recluirse en dichos hoteles, por lo tanto la derrama económica difícilmente llega a otros servidores turísticos como los Guías. Desde el año pasado, la temporada alta ha resultado baja hasta el 50 por ciento o más, comentan
Por Paty Aguilar
Hace tres años, los guías de turistas lográbamos hacer un viaje diario, pero desde el año pasado y este difícilmente hacemos dos a la semana, la situación es crítica, casi no hay turistas y a quienes abordamos no se animan a salir fuera, sin embargo, afortunadamente, tenemos turistas repetitivos que ya nos conocen y ellos son los que nos contratan, comentó Gaudencio, un guía de turistas que trabaja regularmente en Bucerías.
Cuestionado en relación del porqué los turistas tenían temor, explicó que hay un monopolio de turistas por parte de los hoteles que tienen Tiempo Compartido. Los vendedores, dijo, les informan que hay inseguridad en las calles, les indican que tengan cuidado, que no salgan de ciudad y el temor los hace recluirse en dichos hoteles o salir poco, por lo tanto la derrama económica difícilmente llega a otros servidores turísticos como los Guías. Desde el año pasado, la temporada alta ha resultado baja hasta el 50 por ciento o más, comentó.
Los comentarios negativos de los vendedores de tiempo compartido sumado a que efectivamente, las dos últimas temporadas altas de turismo, han resultado bajas, ha afectado sensiblemente el trabajo de los guías de turistas. Gaudencio explicó que él se da cuenta del temor de los turistas, porque cuando los que se animan a viajar con ellos y se dan cuenta que hay seguridad y tranquilidad en las poblaciones y municipios aledaños que visitan, así como en los caminos y vialidades, los turistas comentan que no es verdad lo que les informaron en sus hoteles.
Por otra parte, aun que es temporada alta de turismo, en Bucerías que es una población muy visitada por ellos, se ven pocos turistas, la plaza luce desolada y por todos lados pululan los vendedores con sus productores sin tener grandes ventas como antes. “la situación está muy difícil, no hay dinero, y hay que llevar a comida a la casa, ojalá que en la Semana Mayor, nos vaya mejor” dijo finalmente el Guía de Turistas.