Ocurre en Padrón y Licencias, en estas vacaciones santas y de pascua, hubo descontrol en alcohol, puestos sin permisos y nula supervisión en cruceros
Por Mauricio Lira Camacho
NOTICIASPV
Ahora resulta que para cumplirle a la sociedad, en padrón y licencias hace falta personal.
Admite Iris Ulloa, directora de esta dependencia que en estas dos semanas de vacaciones tanto del período santo como de pascua, algunos hechos se salieron de control.
“No tenemos todo el personal humano para revisar todas las denuncias”, dijo en entrevista.
Por principio de cuentas, aceptó no haber tenido bajo control la supervisión de todas las playas en la región y faltó más comunicación con el director de reglamentos Salvador Cuauhtémoc Villalobos.
Fueron demasiadas las personas que se dedicaron a la venta de alcohol en playas de la localidad y de algunos abusos como fue el caso de gente que trabaja la regidora de Movimiento Ciudadano, Doris Ponce.
A quien se le acusa de haber sido parte esencial en acuerdos para no ser molestada, por la instalación de un puesto en la ribera del río Pitillal, frente al hotel Hollyday Inn.
Pregúntenle a ella que pasó, dijo Ulloa.
Pero también había que lidiar con personal ante la serie de denuncias por exceso de ruido en diversas colonias del municipio.
Admite la funcionaria municipal, ex regidora panista hoy en Movimiento Ciudadano, que faltó mayor coordinación con el director de reglamentos municipales y con el propio coronel, Silvestre Chávez secretario de seguridad ciudadana.
Con quien, dijo, se deberá trabajar más con miras a los próximos períodos vacacionales de este año como son las de verano y de diciembre.
Padrón y Licencias así como Reglamentos tampoco dieron el ancho ante el cúmulo de denuncias por la aparición de la noche a la mañana de personas que solamente se dedican a pedir dinero en los cruceros de la ciudad o que ejercen la mendicidad ante la falta de oportunidades.
Para Iris Ulloa, se hizo un trabajo correcto pues dijo, “personalmente tuve operativos y retiré personalmente a personas de los cruceros, pero no sabía de la existencia de más”, dijo a este periodista.
Además de quienes se ha publicado en ubicación en diversos cruceros de los cuales la autoridad no tenía idea, en estas últimas horas se han apuntado una niña de 9 años de edad que vende chicles en el crucero frente a SAMS y a una persona de muy escasos recursos humanos de edad muy avanzada afuera de la iglesia de nuestra señora de Guadalupe en el centro de la ciudad.
Nada se puede hacer ante el cúmulo de problemas y todo, dicen, por falta de personal y de coordinación.