El gobierno municipal retiró el apoyo a instructoras el pago era de 1, 500 pesos a la quincena y no ha terminado de liquidar las últimas dos
Por Mauricio Lira Camacho
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No les han pagado a instructoras de zumba.
En presidencia municipal, en estas dos últimas semanas han estado yendo instructoras de zumba para que les terminen de pagar lo que les adeudan por el tiempo invertido en la impartición de esta modalidad en las colonias.
En entrevista con una de ellas, quien pidió no fuera publicado su nombre, pero es instructora de zumba en la colonia Progreso, dijo que a partir del 15 de julio, este programa deja de ser subsidiado por el ayuntamiento que encabeza Salvador González.
Pero la comuna les adeuda las dos últimas, la que corresponde al mes de junio de este año.
Durante estos casi tres años, el ayuntamiento estuvo pagando 1, 500 pesos a cada una de las instructoras maestras en las colonias, programa que se institucionalizó, dicen los críticos, para favorecer la candidatura de Adrián Méndez, entonces director de desarrollo social.
Ahí se destinaron los recursos que salían de la comuna, de hecho, Adrián Méndez dijo en campaña que este programa era municipal y se erigiría a nivel estatal y federal, solamente en el caso si ganaba Aristóteles Sandoval, Enrique Peña Nito y el propio Archie.
Con los resultados del pasado proceso electoral del domingo primero de julio, queda claro que del ayuntamiento, no subsidiará este programa de la zumba.
En la entrevista con la instructora confirmó que del ayuntamiento pagaban 1, 500 pesos a la quincena, ella entre 30 y 50 pesos a las personas principalmente mujeres que asistieran a las sesiones.
El dinero que ella recababa era íntegro además del sueldo antes citado.
Hoy, las cosas pintan de manera distinta, no se sabe si de manera oficial continuara el programa aunque la actividad como recreación física y de salud, si seguirá, admitió.
Lo cierto es que la anterior y la actual semana, por la oficina de jurídico, egresos y tesorería municipal, han hecho presencia instructoras de zumba quienes ahora demandan el pago de lo que les deben.
Sabemos que no hay dinero, admiten instructoras, pero confían que si les salden las cuentas pendientes.