* No se le permitirá conectarse al drenaje sanitario de Valle Dorado hasta que no resuelva el dren del agua fluvial de las dos calles que cerraron limitando el desagüe de las aguas de lluvias de Valle Dorado. OROMAPAS reconoce que no tiene área técnica para dictaminar en cuestión del manejo del agua fluvial, situación que habrá de analizarse dentro del Ayuntamiento en las próximas semanas
Por Paty Aguilar
Luego de revisar los planos del drenaje sanitario y fluvial de la obra de construcción de la tienda Chedraui, el OROMPAS corroboró que en efecto, dicho plano fue autorizado por este organismo, sin embargo, está condicionado con la obligación de parte de la empresa de construir un colector para el agua fluvial del fraccionamiento Valle Dorado y del propio predio donde se construye esta empresa, así lo informó, el director, Lázaro Cárdenas, tras señalar que los dos tubos de 30 centímetros que colocaron en las calles adyacentes a dicha construcción, con lo cual están generando inundación a los vecinos, deberán aumentarse de tamaño hasta un metro de diámetro.
Aclaró para tranquilidad de los vecinos, que esta empresa no recibirá autorización de conectar su drenaje sanitario al de Valle Dorado hasta que cumpla con estas disposiciones que este día 1 de noviembre 2011, se le hizo saber al representante legal de Chedraui, licenciado, Gaspar Martínez, quién, según informó el director de OROMAPAS, aceptó reconstruir dichas alcantarillas, pero también deberán terminar el colector del agua fluvial que deberá atravesar la carretera 200 y continuar hasta el canal aledaño a la tienda Wal Mart, alrededor de un kilómetro de distancia.
Lázaro Cárdenas, señaló además, que con el propósito de no recargar dicho colector con las aguas fluviales de las calles cerradas, Valle Dupar y Valle de Puebla, se le propuso a la empresa desaguar un porcentaje hacia el canal que sirve como dren también para Valle Dorado y que desemboca a la altura de TRACSA al otro lado de la carretera 200, lo cual inicialmente fue aceptado por Chedraui.
Desafortunadamente para los vecinos que previamente asistieron a una reunión informativa al respecto en la Dirección de Obras Públicas, no se les informó sobre dicha propuesta, la cual, si se levara a cabo, generaría inundación mayor en las casas habitación de la calle Valle San Luis que tienen frente a ellas este canal y que cada año tienen el problema de inundación porque este canal no es suficiente para sacar el agua de la lluvia durante una fuerte tormenta, como ya lo tiene registrado la dirección de Protección Civil y Bomberos que cada año atienden a estas familias.
La información anterior, no la conocía el nuevo director del OROMAPAS y el área técnica de este organismo no tomó en cuenta esta condición. Ante tal observación que hicimos, dado que este medio de comunicación año con año da cobertura a estas inundaciones con la solicitud de los vecinos que les resuelvan el problema, Lázaro Cárdenas, consideró revisar de nuevo la propuesta tras realizar junto con el personal del área técnica una inspección física de la zona para evitar un daño mayor a los vecinos de ese lado del fraccionamiento.
Ante esta situación, el director del OROMAPAS, reconoció que dicho organismo no cuenta con un área especializada en aguas fluviales, así como tampoco lo tiene la Dirección de Obras Públicas, por tal motivo, dijo, convocará a una reunión de directores con el propósito de determinar, primero, cual dirección llevará a cabo dichos dictámenes y posteriormente, crear esta área que es de vital importancia para el desarrollo urbano de Bahía de Banderas.
Y es que durante la administración pasada, sin mayores alegatos, se instruyó al OROMAPAS para que diera este tipo de dictámenes sin contar con el área técnica correspondiente, según explicó, Lázaro Cárdenas. Se trata de una situación irregular, dijo, que deberá ser subsanada a la brevedad luego de informar al alcalde, Rafael Cervantes Padilla, ya que la Dirección de Obras Públicas, tampoco cuenta con este tipo de personal especializado, lo que deja en desventaja al Ayuntamiento ante el poderío de las grandes constructoras que reciben dictámenes a su favor sin haberse realizado estudios hidrológicos acordes a las nuevas circunstancias de la orografía del municipio que en menos de una década ha cambiado vertiginosamente con obras de construcción de toda índole.