• Además, gente del centro alerta, a partir del mes de febrero iniciarán trabajos de ampliación de banquetas, menos calles, cajones de estacionamiento y camiones
Por Mauricio Lira Camacho
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Aumenta presión social en contra de la autoridad municipal que encabeza Salvador González debido a una serie de medidas, que a decir de varios colonos del centro perjudican la vida activa en el primer cuadro de la ciudad.
Por principio de cuentas, respecto al cierre de la calle Iturbide, que a nadie de los dueños y encargados de establecimientos diversos y vecinos el gobierno local consultó.
Así como la medida extraoficial de que a partir del primero de febrero, quedará cerrado el centro de Puerto Vallarta, ahora por cuestiones de la ampliación de banquetas.
Proyectos que nadie de la actual administración ha querido dar la cara para informar.
Así lo manifiestan vecinos residentes en el centro, quienes adelantaron esta noche en la esquina de las calles Hidalgo e Iturbide, se reunirán para mostrar su inconformidad respecto al proyecto, el cual va muy avanzado.
De acuerdo con testimonios de trabajadores en dicha obra, se trata de la construcción de una plazoleta y jardinera.
Ante la falta de información de parte del gobierno, vecinos y locatarios de la zona manifiestan su sentir porque se ha iniciado, lo que es considerado el cierre de la vida activa y económica del centro de Puerto Vallarta.
Este lunes por la noche, estarán reuniéndose vecinos del centro quienes protestarán por el cierre de la calle Iturbide.
En entrevista, varios señalaron que existe un documento con 20 hojas que tienen firmas de vecinos y comerciantes, escrito que fue recibido por la oficialía de partes y sellado bajo expediente 7480 2012, el asunto que se indicó fue la inconformidad de cierre de la calle Iturbide y de cualquier otra que se presente en el centro de la ciudad.
Enterados del caso están el alcalde, Salvador González y el síndico, Fernando Castro Rubio.
Según los testimoniales y entrevistas con quienes se dicen afectados, critican el cierre de eta vialidad, y que pese a oficios de información, la autoridad no ha tenido la responsabilidad siquiera de escucharlos.
Aducen que en este momento todavía se vive una dinámica económica gracias a las calles y cajones de estacionamiento que permite la fluidez de los vehículos y poder tener comercio de los diversos productos.
Sin esta dinámica, aseguran, al quitar calles para construir plazoletas o jardineras, la actividad se vendrá aún más de manera precaria.
Lo que vecinos insisten es que el ayuntamiento debe suspender la destrucción de la calle Iturbide entre Juárez e Hidalgo, solicitan que se deje el flujo vehicular y permanezcan los cajones de estacionamiento.
Que se suspenda la realización de cualquier tipo de proyecto, que tenga por objetivo cerrar calles.
Finalmente que el gobierno municipal no quite más cajones de estacionamiento contiguos a las fincas de la colonia en el Centro.