Daniel Curiel del restaurante El Malecón reta a Rebeca Guereña demuestre que invaden espacio en playa, además acusa no pagan impuestos federales
Por Mauricio Lira Camacho
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Restaurante El Malecón Acusa Cooperativa No Paga Impuestos
Daniel Curiel del restaurante El Malecón reta a Rebeca Guereña demuestre que invaden espacio en playa, además acusa no pagan impuestos federales
Daniel Curiel dueño del restaurante El Malecón, se defiende de las acusaciones y reta a Rebeca Guereña, muestre a la opinión pública su título de concesión, para operar un restaurante bar, en donde se supone solamente es zona de sociedad cooperativa de pescadores La Rosita.
Desmiente que esté invadiendo zona de concesión a dicha cooperativa, “nosotros tenemos derechos desde hace mucho, llegamos antes que la sociedad de pescadores”.
La concesión del restaurante, está a su nombre, dijo, “hemos estado aquí por 50 años nosotros pagamos una concesión”.
Nosotros pagamos lo que se debe por ley, los Guereña tienen una concesión como sociedad cooperativa de pescadores La Rosita, ellos tienen fondo que les impide pagar concesiones, pero hoy trabajan como restaurante bar, señaló.
Nosotros si pagamos concesión desde que comenzaron allá por la década de los años 70.
No invadimos ningún espacio, lo que queremos es trabajar, queremos hacer un servicio, señaló.
A ellos los acusan de que invaden, pero refiere Curiel no es así, los Guereña construyeron los baños y una rampa pero en ese inter de propiedad con el restaurante El Malecón, dejan escombro y basura-
Lo que nosotros estamos haciendo es habilitar escaleras desde nuestro espacio para que la gente que viene a nuestro restaurante pueda pasar a la playa y ahí instalarse sin usar ninguna área de la sociedad cooperativa.
“Que nos dejen trabajar, aquí nadie está invadiendo espacio y los invito a que vayan a zona federal terrestre y marítima a que chequen quien tiene concesión, si ellos o no.
Yo tengo la concesión que nos avala el espacio y por ello hacemos los pagos correspondientes y los Guereña no.
Pagamos 90 pesos el metro cuadrado de concesión federal, “que ellos paguen los derechos también”, concluye Curiel.