Por Mauricio Lira Camacho
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Si el ayuntamiento que preside Salvador González no ayuda con recursos económicos a los familiares de los policías, por lo menos que se les reconozca, principalmente a quienes dieron su vida en el cumplimiento de su deber.
Lo anterior tras una iniciativa como punto de acuerdo, para que se designe un área de la academia regional de policías para plasmar los nombres en placas de los oficiales caídos en el cumplimiento de su deber.
Dentro de la exposición de motivos, se explicó que es una obligación dotar a las instituciones municipales de las herramientas necesarias para poder ejercer el trabajo correspondiente y en este sentido, a la policía municipal, que ha perdido a hombres y mujeres de valor, que componen el cuerpo de seguridad pública, son ellos quienes dan la cara ante situaciones difíciles, bien equipados o no, se les llama a trabajar pidiéndoles lo más difícil de todo que es arriesgar su vidas y ponerla al servicio de todos.
Se reitera que sean reconocidos y homenajeados quienes fueron compañeros a quienes trabajaron con entrega a la institución de quienes combatieron con vida a la inseguridad.
Ahí es donde está la vocación, de la entrega de ellos los policías y es importante que sus nombres queden plasmados en la academia, donde se formaron como oficiales de seguridad pública, que se les recuerde como es debido, como héroes, no olvidando sus vidas en una semana, quince días, un año porque la huella y el vacío que ha quedado no se llena con nada, termina la iniciativa planteada por el regidor panista Héctor Gallegos de Santiago.