Sin Escuela, Niño Trabaja para Ayuda del Sostén Familiar

Es constante que en calles de Fluvial Vallarta, un niño entre semana ayuda a una persona discapacitada a moverlo y en la venta de productos para el sostén familiar

Por Mauricio Lira Camacho
NOTICIASPV

Niño sin estudios, ayuda a discapacitado para venta de productos y en el sostén familiar.

Es común ver a un niño de menor a los 12 años de edad, deambular empujando una silla de ruedas de una persona discapacitada, para la venta de productos y quizá para el sostén de la familia.

Preferentemente se le observa días entre semana, a partir de las 9 de la mañana en inmediaciones de las avenidas del fraccionamiento Fluvial Vallarta.

Al parecer ayuda a la venta de paletas frescas de diversas frutas, lo que sí, es que ayuda a una persona discapacitada empujando su silla de ruedas.

Su aspecto, es de un niño de aproximadamente 6 años de edad, bajito para su estatura, tez morena y cabello negro, risueño pero quizá con los sueños de a esa hora estudiar como casi todos los niños de su forje.

Es lunes, temprano y ya con el sol a plomo, para nadie pasa desapercibida la imagen de un niño empujando esta silla de ruedas.

Con fuerza y rumbo, lleva a esta persona que no tendrá más de 30 años de edad, discapacitado de sus piernas, por las calles de Fluvial Vallarta.

Iniciando el recorrido por inmediaciones de la Farmacia Guadalajara, para irse internando por Grandes Lagos, hasta llegar a las instalaciones de la comisaria de seguridad ciudadana en dicho fraccionamiento.

Al parecer nada se sabe de recorridos y/o operativos que lleve a cabo la representación del sistema para el desarrollo integral de la familia en Puerto Vallarta, DIFPV, para tratar de ayudar a que no haya niños en situación de la calle o de aquellos que con acuerdo propio o sometimiento, tengan que trabajar para cooperar en el sustento familiar.

En ocasiones,

En Fluvial Vallarta no hay muchas casas, ya que las calles todavía presentan demasiados lotes desocupados sin construir o edificar, lo que hace trayectos largos y cansados, lo cual se refleja una vez que terminan los recorridos de estas dos personas, una discapacitada sin poderse mover por voluntad propia y la de un niño que a esa hora del día, debería estar en un salón de clases.

Cabe destacar que ante este tipo de problemas sociales, hay varias aristas, por ejemplo que

Como niños de la calle se denomina a aquellos que viven en las vialidades de una ciudad, privados de atención familiar y protección de un adulto.

También los niños de la calle viven en edificios abandonados, cajas de cartón, apartamentos, estaciones en desuso o en cualquier rincón donde puedan dormir sin ser agredidos ni descubiertos por la policía.

Es difícil encontrar una definición precisa que pueda definir la enorme variedad de circunstancias en las que estos niños de la calle viven día a día.

Sus condiciones son muy heterogéneas, desde niños que pasan todo el día en la calle y duermen en casa, con unos padres poco capacitados para atenderle adecuadamente; a jóvenes totalmente independientes que establecen sus propios grupos sociales, o comunidades de drogadictos dedicados al robo.

O en el caso que se ilustra aquí que pudieran ser menores de edad, niños, que ayudan en el trabajo para personas discapacitadas.

La UNICEF ha establecido dos categorías definitorias de este término:

Niños de la calle son aquellos que están relacionados con algún tipo de actividad económica, que va desde la mendicidad a la venta modesta.

La mayoría de ellos vuelven a casa de pujar metal al final del día y contribuyen con sus ingresos a la economía familiar.

Ocasionalmente pueden asistir a la escuela y normalmente mantienen cierto sentido de comunidad familiar.

Debido a la precariedad de la situación económica familiar, estos niños pueden verse eventualmente empujados a una estancia más permanente en la calle.

Niños de la calle también son aquellos que realmente viven en la calle, fuera de un medio familiar convencional. Los lazos familiares pueden existir todavía, pero son mantenidos sólo ocasional o involuntariamente.[1]

Hay niños así en muchas de las grandes ciudades del mundo, y especialmente en países en vías de desarrollo, y son víctimas de abusos, negligencia y explotación.