Ediles exhortan al alcalde, gire instrucciones para que personal de la comuna, aplique sanciones estipuladas en artículo 223, contra propietarios de terrenos baldíos que no limpien sus lotes, principales focos de contaminación
Por Mauricio Lira Camacho
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Piden al alcalde gire órdenes para que sea aplicadas multas contra propietarios de terrenos baldíos que estén sin limpiar y que sean graves focos de contaminación.
Se trata de un exhorto para que el presidente municipal de Puerto Vallarta, Ramón Demetrio Guerrero Martínez, ordene a las comisiones de inspección y reglamentos, jurídico, del medio ambiente y ecología, para que de manera conjunta coordinada se implemente de manera inmediata de acuerdo con el reglamento de ecología una serie de disposiciones.
Las cuales están fundamentadas en título XI de las infracciones y sanciones así como de recursos del capítulo I, artículo 223 capítulo XIV que a la letra señala, “se impondrá multa de 50 a 100 días de salario mínimo a quien siendo propietario de un terreno baldío no impida que este utilice como tiradero de basura o que se convierta en foco de contaminación ambiental o de fauna nociva.
Lo anterior derivado de que cada fin de semana, durante recorridos de ediles de diversas comisiones, se nota que en las tareas de limpieza por diversas colonias, y a demanda ciudadana es de los múltiples problemas que se señalan que ocasionan los problemas baldíos, los usan para llevar carros hechos chatarra, la condición de descuido y abandono, que propicia abandono y de focos de infección por el acumulamiento de basura.
Además que propicia la formación de encharcamientos de agua, que provocan enfermedades, terrenos insalubres llenos de maleza, que sirven de punto de reunión de vándalos.
Se dijo también, que todo esto afecta a prácticamente todas las colonias del municipio de Puerto Vallarta.
Causando un menoscabo patrimonial a los vecinos colindantes como para el municipio en tareas de limpieza.
Por lo que es imprescindible la aplicación de las multas señaladas, en el reglamento de ecología de Puerto Vallarta, según artículo 223.