Tinder es una app que surgió para que la gente pudiera conocer a otras personas con base en sus fotografías, lo cual ha sido cuestionado por muchas personas.
Más allá de su naturaleza, ahora ésta se pone en tela de juicio porque uno de sus cocreadores Justin Mateen, es acusado de acoso sexual por una de las empleadas de la misma empresa.
De acuerdo con el sitio Tech Crunch, Whitney Wolfe, vicepresidenta de mercadeo de Tinder, fue quien puso la demanda porque Mateen le mandó varios mensajes de correo y por la app en los cuales se le insinuaba aunque ella lo rechazó.
Asimismo, al ver que ella no aceptó, en una ocasión la llamó «puta» enfrente de el CEO, Sean Rad.
En la demanda incluso se acusa al CEO de que desestimó estos comentarios o las quejas de Wolfe y cuando ella renunció, él enfureció y la despidió. La mujer también afirma que participó en la creación de Tinder y pide su crédito como cofundadora.
Al respecto, Tinder confirmó las acusaciones y suspendió a Marteen mientras se investiga el caso. Declaró que ««Ha quedado claro que el Sr. Mateen envió mensajes privados a la Sra. Wolfe con contenido inapropiado. Condenamos estos mensajes, pero creemos que las denuncias de la Sra. Wolfe con respecto a Tinder y su gestión son infundadas».