Comandos armados incendiaron, entre el viernes y el sábado, una docena de camiones y camionetas repartidoras de productos de la empresa Sabritas en Celaya y Salvatierra, Guanajuato, en una acción idéntica a la realizada en Michoacán, donde fueron quemados 28 vehículos y tres bodegas de esta compañía.
Armando Amaro Vallejo, subprocurador de Justicia de Guanajuato, dijo que la quema de unidades ocurrió en dos eventos distintos en dichos municipios, al sur del estado.
El primer hecho, cuyo reporte fue difundido ayer, ocurrió el viernes a las 21:30 horas, cuando al estacionamiento de la bodega de la empresa –a la salida de la ciudad de Celaya, sobre el libramiento que conduce a Salvatierra–, un comando ingresó y lanzó gasolina y prendió fuego.
En este acto, de acuerdo con versiones de testigos de las primeras indagaciones policiacas, siete camionetas quedaron calcinadas.
Los presuntos delincuentes ingresaron a la bodega abriendo fuego con armas largas AK-47.
El segundo hecho se registró el sábado a la 1:20 de la madrugada, cuando otro comando ingresó a la bodega de la empresa Sabritas y prendió fuego a cinco unidades de la compañía, en las cuales podía leerse la palabra Sonric’s.
La Procuraduría estatal capturó a cuatro personas, quienes se transportaban en una camioneta Explorer, en la cual les fueron asegurados dos galones de gasolina.
La dependencia se reservó la identidad de los detenidos y si en la camioneta se hallaron armas.
El sábado, tal como ha sido ya informado, presuntos integrantes del crimen organizado incendiaron tres bodegas y 28 vehículos de la empresa Sabritas.
De manera extraoficial se conoció la hipótesis de que la agresión fue en represalia por el uso de unidades de Sabritas en operaciones encubiertas por parte de fuerzas federales, las cuales en principio se dijo que se trataba de la Policía Federal y posteriormente el Ejército.