Caos Vehicular

  • Sin presencia de tránsito y señalamientos con antelación, debido a obras de pavimentación, por dos días se provocó un caos vehicular que afectó a locales y turistas

Por Mauricio Lira Camacho
NOTICIASPV

Caos vehicular en hora pico, durante dos días en el ingreso al pueblito típico de Puerto Vallarta.

Desde el hotel Sheraton al centro, enorme problema con la fluidez de autos, siendo el miércoles de más problemas debido a la llegada de cruceros y el viaje en autobuses hasta la el corazón de la ciudad.

Residentes locales, automovilistas, repartidores, taxistas, camioneros, turistas en renta de autos  y viajeros de crucero que fueron llevados en camiones especiales, tuvieron que soportar el calor y los efectos de una nula coordinación entre dependencias, para no agravar el problema.

Desde plaza santa maría, luego de las 10 de la mañana, se advertía que había tránsito pesado más adelante, sobre avenida de ingreso.

Algunos optaron por tomar su curso vial, en el crucero rumbo al libramiento carretero “Luis Donaldo Colosio”.

Para quienes no lo hicieron, el malestar fue evidente pues el trayecto hasta el centro fue a paso de rueda.

De los cuatro carriles que van de norte a sur, justo a la entrada del pueblito típico poco antes del restaurante El Andariego, el ingreso se dificultó de manera grave.

Lo anterior por el paso de camiones pesados a los carriles que de 4 se convierten literalmente en dos y los choferes, deben de incorporarse.

Metros más adelante, el tránsito se agravó aún más, ya que está el semáforo del crucero lo que dificultó el paso.

En todo ese trayecto no se observó a ninguna patrulla o elemento de tránsito para agilizar el paso de los vehículos desde avenida de ingreso a la altura del hotel Sheraton hasta el centro.

Cierto que existió durante dos días un señalamiento desgastado con indicaciones al revés de por dónde tenía que transitar uno.

Sin embargo, como es una costumbre al final de cuentas los conductores de autos particulares, transporte y camioneros, quieren ingresar a la fuerza.

De los dos carriles que finalmente se hacen al ingreso del pueblito típico, para pasar solamente se hace uno por el que deben cruzar de manera alterna y en desorden camiones y autos particulares.

El malestar de automovilistas particulares y de los turistas a bordo de camiones especiales que quedaron atrapados en el tráfico, fue más que evidente.

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