Reforma religiosa sin consenso en Senado

Cada domingo, desde el 18 de febrero pasado, el cardenal Norberto Rivera ha defendido la reforma al artículo 24 de la Constitución, que los senadores aprobaron el miércoles pasado en comisiones unidas. Pero a pesar del avance, no hay consenso para aprobar la reforma en el pleno.

La falta de acuerdo, incluso en el PAN, apunta a que la reforma sea llevada al pleno una vez que el papa Benedicto 16 termine su visita a México y regrese a El Vaticano.

Y es que abrir la discusión esta semana significaría aprobar la reforma en la conmemoración del natalicio de Benito Juárez, emblema del Estado laico mexicano, de ahí que ese escenario tenga nulas posibilidades.

Legisladores del PAN y PRI insisten en que la modificación no responde a los intereses de la Iglesia, aunque la oposición denunció presiones del clero y exige que la minuta de diputados se vote en contra para que quede sin efectos y se mantenga firme la redacción actual del artículo 24.

El presidente de la comisión de Puntos

Constitucionales del Senado, Melquiades Morales (PRI), aseguró que la reforma no es «un regalo» para la Iglesia católica por la visita del papa Benedicto 16 a México, programada para el próximo 23 de marzo.

«Esto no es un juego; se tenía que desahogar y seguir el trámite parlamentario. No trastocamos el sentido de la Constitución u ofendemos a las asociaciones religiosas ni trastocamos el carácter laico del país», dijo.

Alejandro González Alcocer, senador del PAN, reveló que en su bancada ya se hizo una «votación indicativa» y no hay una determinación en el grupo para votar en un sentido. Se manifestó en contra del proyecto por considerarlo un «galimatías». Su compañero Alejandro Zapata Perogordo, presidente de la comisión de Estudios Legislativos, dijo que acordaron eliminar de la exposición de motivos el párrafo que establecía como proceso vinculante revisar los cinco artículos de la Constitución que fundamentan el carácter laico del Estado mexicano.

Los senadores eliminaron la posibilidad de revisar los preceptos del Estado laico y dejaron firme la obligación de que la Secretaría de Gobernación autorice algunos eventos religiosos al aire libre, entre otros.

El PRI condicionó su aval a la aprobación de la reforma al artículo 40, para agregar la palabra «laica» al abanico de características de la República, pero su senadora María de los Ángeles Moreno adelantó que ella y otros priístas votarán en contra una vez que llegue al pleno.

Por su parte, Pablo Gómez, senador del PRD, dijo que la reforma, al igual que la de 1992, fue pactada directamente entre la Presidencia y la Iglesia.