TORREÓN, 8 de febrero.- Luego del secuestro de cinco trabajadores del periódico “El Siglo de Torreón”, el rotativo fijo su postura y aseveró que tras el plagio se pone de manifiesto las nulas condiciones de seguridad para los medios de comunicación.
Los cinco compañeros fueron liberados la madrugada del viernes, por seguridad de los trabajadores y protección a las víctimas no se proporcionaron más detalles.
“Sin embargo, lo ocurrido la noche del jueves resulta alarmante porque abre un nuevo frente en la vulnerabilidad de los medios de comunicación, pues los trabajadores secuestrados no pertenecen al área de redacción.
“Esto significa que cualquier trabajador de un medio ahora puede ser víctima de una agresión que busque afectar una cobertura periodística mediante la violencia.
“Los medios de comunicación hemos quedado atrapados en la ola criminal desatada en La Laguna y el resto del país en los últimos años, a pesar de que sólo somos actores sociales que buscan informar los hechos que han golpeado a nuestras comunidades”, da a conocer El Siglo de Torreón en su página de internet.
Las instalaciones de El Siglo de Torreón, han sido objeto de por lo menos dos ataques que dejaron serios daños en la fachada del inmueble.
El medio informativo destaca dos ataques en agosto de 2009 y noviembre de 2011, cuyas investigaciones no han sido dadas a conocer por las autoridades estatales.
“En El Siglo de Torreón mantenemos el compromiso de seguir informando a la comunidad sobre lo que ocurre en nuestra Comarca Lagunera”, informaron.
El jueves 7 de febrero aproximadamente a las 21:30 horas cinco trabajadores fueron privados de la libertad por un grupo de hombres armados en varios puntos de la ciudad de Torreón, horas más tarde fueron liberados.
Las víctimas fueron dos empleados de la página web, dos del área de publicidad y uno de cobranza.
De acuerdo a las investigaciones, uno de ellos fue plagiado afuera de las instalaciones del periódico, otro en una tienda de conveniencia, tres más en sus propios domicilios hasta donde ingresaron los hombres armados.
Aunque no se dio a conocer el móvil del secuestro, se presume que se trata de la publicación de algunas notas periodísticas.
El gobierno del estado reprobó los hechos, al tiempo que la Procuraduría General de Justicia de Coahuila, abrió una investigación dentro del ámbito de su competencia.
La dependencia estatal reprueba y condena los hechos y se compromete a agotar todas las líneas de investigación en el ámbito de su competencia para dar con el paradero de los agresores.
“La actual administración estatal, desde su inicio, ha venido realizando tareas para contar con una mejor policía, con acciones como lo son: dotar de más equipo a sus cuerpos policiales, mantener una capacitación constante, hemos aplicado exámenes de control de confianza y hemos dado de baja a los policías que no son aptos para guardar la seguridad del estado”, destaca un comunicado de la Procuraduría General de Justicia de Coahuila.