Millones de personas en México anhelan un hijo, sin embargo no pueden hacerlo de forma natural. De acuerdo con las más recientes cifras del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEGI), en nuestro país 1.5 millones de parejas tienen problemas de infertilidad, los factores ambientales y el estilo de vida actual disminuyen en un 30% las probabilidades de concebir un embarazo, según reflejan diferentes estudios internacionales.
Aunque habitualmente la infertilidad en nuestro país estaba ligada con las mujeres, y según cifras de la Secretaría de Salud una de cada seis mujeres presentan problemas de infertilidad, también es cierto que el 40% de los casos están relacionados con el hombre, siendo el hábito tabáquico una de las causas de esta infertilidad. Se estima que casi la mitad de los fumadores pueden llegar a tener problemas de fertilidad. Los fumadores tienen una concentración menor de espermatozoides, a consecuencia de la nicotina, la cual deteriora la producción de estos gametos. Además, puede originar problemas en la composición del semen y disminuir la calidad espermática del hombre al fragmentarse el ADN de los espermatozoides, lo que conlleva una reducción significativa de las tasas de fecundación e implantación, así como de la calidad embrionaria.
El sedentarismo, el consumo de cafeína, el alcohol, la obesidad, el ritmo de vida citadino, distintos compuestos químicos presentes en insecticidas, entre otros factores están reduciendo considerablemente la posibilidad de tener un hijo. Este problema que ha sido identificado a nivel mundial también está afectando a muchas parejas en nuestro país.
Claudio Serviere, director general de IVI en México resalta numerosas investigaciones que han demostrado que entre estos factores ambientales existe una mayor relación de causa y efecto entre el consumo de tabaco y la infertilidad. «En el caso de las mujeres mexicanas, la infertilidad tiene estrecha relación en su estilo de vida, ya que el consumo de sustancias nocivas para el organismo, principalmente el tabaco, aunado a la alimentación, el estrés y la falta de descanso, influyen negativamente a la hora de concebir el embarazo», comenta.
El doctor Serviere subraya que múltiples estudios científicos evidencian el efecto negativo que tiene fumar sobre la fertilidad, incluyendo prácticamente a todos los sistemas implicados en el proceso reproductivo. Esto es especialmente importante en nuestro país siendo que la Organización Panamericana de la Salud informa que el 30% de las mujeres fumadoras están en edad reproductiva.