Francisco Javier Godínez Cañedo conoció a una joven en una fiesta y luego se ganó su amistad. La semana pasada fue enviado a prisión por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, porque contactó a la mujer con un nombre falso en una red social, le ofreció trabajo como edecán, lo que le permitió obtener fotografías sugerentes, mismas que usó para extorsionarla.
La Subprocuraduría de Averiguaciones Previas Centrales, a través de la Fiscalía Central de Investigación para la Secuestros, consignó a Godínez Cañedo al Reclusorio Preventivo Oriente por su probable responsabilidad del delito de extorsión agravada.
De acuerdo con las pesquisas, la joven afectada conoció a Javier Godínez en una fiesta y después empezó a tener contacto con él a través de una red social.
El 14 de febrero de este año recibió un correo electrónico de su supuesto conocido, quien le refirió tener un amigo que solicitaba edecanes y, por internet, la mujer le envió un juego de fotografías.
Un mes después la afectada recibió otro correo electrónico del ahora probable responsable de extorsión, quien para no ser identificado puso otro nombre. Le exigía dinero, pues de lo contrario subiría las fotografías a internet y las enviaría a su trabajo, amistades y familiares.
Luego de conseguir una parte del dinero que solicitó, la mujer recibió la orden de trasladarse a la carretera Picacho-Ajusco, donde debía entregar el resto del numerario a un sujeto que se cubría el rostro con una capucha y lentes. El contato llegó a bordo de un vehículo Ford Fiesta.
Cuando el presunto extorsionador se alejó del lugar, la mujer solicitó auxilio a elementos de la Policía de Investigación para detenerlo. Al tenerlo a la vista lo identificó como Francisco Javier Godínez, el supuesto amigo que conoció en la fiesta.
En diciembre de 2011 la PGJDF consignó al Reclusorio Preventivo Norte a siete empleados de una empresa de limpieza, debido a que presuntamente abusaron sexualmente de un compañero de trabajo, al que golpearon y vistieron con ropa de mujer, delito que grabaron con teléfonos celulares. El ilícito lo cometieron en las inmediaciones del estadio Azteca, el 28 de diciembre.
En el expediente se indica que la víctima declaró que en la mencionada fecha, cuando llevaba a cabo labores de limpieza, “fue sorprendido por los inculpados, quienes lo sometieron y, con lujo de violencia, lo despojaron de sus ropas para vestirlo de mujer”.
Los responsables lo subieron a un auto, donde abusaron de él. Ahí nuevamente le quitaron la ropa para grabarlo con teléfonos celulares, imágenes que —dijeron— subirían a las redes sociales para que se enteraran más personas.