- Los permisionarios de taxis colectivos que aceptaron entrar a esta ruta, sufrieron pérdidas económicas, sin embargo, poco a poco, los trabajadores empezaron a utilizar su servicio y hoy en día es una de las rutas más rentables que les permite dar empleo a choferes, es por ello que consideran se trata de un patrimonio familiar que ahora otros les quieren invadir
Por Paty Aguilar
El conflicto que se generó en Nuevo Vallarta entre transportistas de taxis colectivos, tiene su historia, una historia de trabajo, disciplina y respeto hacia este desarrollo por parte de los trabajadores del volante que se prepararon para dar este servicio en un marco de limpieza y bien organizados para no generar desorden en esta zona turística, lo cual así había sido hasta que otros permisionarios decidieron invadir esta ruta de manera abrupta. A continuación la historia de estos permisionarios y la razones y motivos de quienes pretendieron entrar a la fuerza a Nuevo Vallarta.
El desarrollo turístico Nuevo Vallarta, es considerado como el principal eje económico de Bahía de Banderas y Nayarit, donde cientos de habitantes de este municipio laboran diariamente, sin embargo, hace cuatro años no contaban con servicio de transporte, es por ello que los mismos grandes hoteles, les brindaban este servicio, mientras que los taxis colectivos, cubrían ampliamente la ruta hacia Puerto Vallarta, hasta entonces todo iba bien para los permisionarios y trabajadores del volante.
Sin embargo, en ese tiempo se generó un conflicto con los transportistas de Puerto Vallarta que empezaron a bloquear el trabajo de los taxis colectivos reduciéndolos a tener pocas paradas, lo cual provocó el desplome económico de los permisionarios. Por este motivo y con el fin de mantener el empleo, los líderes del transporte de Bahía de Banderas, se las ingeniaron para establecer nuevas rutas pero dentro del propio municipio, fue así que nació la idea de entrar a Nuevo Vallarta, se hicieron las gestiones necesarias ante empresarios hoteleros y autoridades del gobierno estatal, quienes finalmente determinaron que solo se les permitiría entrar al desarrollo 20 unidades, esto con el fin de no afectar el fraccionamiento con alta densidad de tráfico público, lo cual fue aceptado y se llevó a cabo un convenio debidamente consensado.
Pero fueron pocos los permisionarios que se atrevieron a meter sus unidades a Nuevo Vallarta, solo cuarenta unidades se apuntaron, es por ello, que diariamente, trabajan 20 de ellas y las otra 20 lo hacen otro día, es decir, un día trabajan y otro no, fue así como se organizaron entre ellos mismos para cubrir las unidades pactadas que solo podrían entrar, lo cual hasta la fecha se ha respetado y se hizo con disciplina y dedicación. Los primeros meses fueron desastrosos económicamente, porque los trabajadores eran pocos y no usaban el servicio, fue poco a poco que se construyeron más hoteles, más restaurantes y las fuentes de empleo aumentaron, y por ende más trabajadores requerían este servicio hasta que se logró hacer rentable esta ruta. Lo anterior, lo informó el coordinador de esta ruta por parte de la ACASPEN, Jorge Aguilar González, quienes crearon una Asociación para este grupo de unidades y permisionarios.
Por su parte, Martín Marrufo Galindo, quien encabezó la invasión de esta ruta, secretario de trabajo del Servicio Colectivo de Taxis de Bahía de Banderas A.C., tras reconocer que hay una agrupación que dirige Everardo Zarate, que hace el servicio de transporte a Nuevo Vallarta desde diversas comunidades bajo un convenio que hicieron entre ellos mismos. Luego señaló que él no conoce una ley que les impida dar un servicio de un pueblo de origen hacia otro lugar, por eso, dijo, ellos estaban peleando este derecho de llevar familias a Nuevo Vallarta porque ellos tienen su sitio en estas comunidades y la ley se los permite.
Argumentamos que cómo sitio tenía razón, pero como taxi colectivo, sabíamos que había convenios con anuencia de Tránsito del Estado para trabajar de esta manera, ya que no había legislación al respecto. Ante esta aclaración, Martín Marrufo, explicó “somos un servicio que por costumbre lo damos a Puerto Vallarta, se abre una nueva oportunidad hacia Nuevo Vallarta, y nosotros también pretendemos darlo, como lo da ese grupo”.
Aseguró que decidieron entrar a Nuevo Vallarta porque tanto el Secretario de Gobierno, Roberto Mejía, así como el director de Tránsito del estado, les dio luz verde de manera verbal, tras aceptar que no se había realizado un convenio por escrito. Añadió que ellos solo querían trabajar y tenía derecho de hacerlo, por ello, decidieron meter 7 unidades, pero no les permitieron entrar los miembros de la otra agrupación.
Se trata de justicia, dijo Martín y recordó que la ruta a Vallarta la iniciaron su grupo y en aquel entonces, dijo, nunca les tomaron parecer para que otros permisionarios entraran también a Puerto Vallarta es por ello que consideró que la ruta de Nuevo Vallarta es para todos, con un orden, pero para todos, sostuvo, por ello solo trataron de meter 7 unidades.
Finalmente, señaló que los convenios hechos todos estaban amañados y que ellos tenían derecho por justicia a trabajar esta ruta hacia Nuevo Vallarta porque la expedición de tantos permisos dados por el gobernador y vendidos por Raúl de Los Santos, les había afectado a todos los permisionarios y por eso quieren también trabajar en esta ruta que hace cuatro años abrieron los otros permisionarios y donde saben se trata de una ruta rentable, tras reconocer que cuando se abrió ellos no aceptaron entrar, como lo corroboró, Alfonso Jiménez Hinojoza, líder también de este grupo.