*El entierro de un guerrero decapitado y un horno prehispánico de producción cerámica, fueron encontrados en las faldas del cerro El Tlatoani.
El entierro de un guerrero decapitado y un horno prehispánico de producción cerámica, fueron encontrados en las faldas del cerro El Tlatoani, en el municipio de Tlayacapan, Morelos.
Arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), detallaron que los hallazgos son del periodo Clásico Tardío (350-600 d.C.).
En esta área se localizó una cista funeraria con un individuo acompañado de un ajuar muy rico. Su atavío consta de orejeras y un collar con cuentas de piedra verde, otros artefactos también de este material y una serie de vasijas. Entre los restos óseos se identificaron las extremidades inferiores, y las vértebras cervicales con huellas de corte, lo que indica su decapitación”, dijo el arqueólogo Raúl Francisco González Quezada.
A través de un comunicado, indicaron que el cráneo muestra una perforación provocada posiblemente por una punta de proyectil, a la cual sobrevivió, pues la herida cerró antes de morir, lo que refiere pudo haber sido un guerrero.
Por las cualidades de su ajuar funerario y la ubicación de su inhumación podría tratarse de un sujeto que formaba parte de la clase hegemónica de la sociedad tlayacapense de su época. Dichas piezas se encuentra en restauración y análisis”, indicó.
En cuanto al horno, representa uno de los pocos contextos de producción cerámica de época prehispánica que han sido ubicados en el estado de Morelos hasta el momento.