Poco, casi nada, se supo de los gustos de Steve Jobs por el séptimo arte. Sin embargo, una persona tan entregada a la perfección y tan intolerante a argumentos vacíos, tendría como derecho despreciar “iSteve”, la película que Funny or Die le dedicó y publicó esta semana.
Justin Long hace gala de un Steve Jobs inocente, poco brillante y aburrido. Steve Wozniak, interpretado por Jorge García, cumple con el papel de un cofundador pasivo de Apple. Más allá de la pereza, causa aversión.
Quizá el gancho resultaba ver la relación que Jobs y Bill Gates (James Urbaniak), tenían. Más allá de apegarse a los hechos, Ryan Perez, guionista de la película, se inventó una historia. Entre sus fantasías, algunas de ellas aberrantes, estaba que Jobs y Gates eran grandes amigos desde la juventud, en situaciones por demás inverosímiles. Ryan Perez argumentó que el guión se realizó en menos de una semana. La película fue grabada en cinco días. ¿La fuente del relato? Wikipedia.
La cinta, de casi 80 minutos, es tan mala, que vale la pena verla solo para tenerla como referencia del sótano de una serie de contenidos que saldrán sobre el fundador de Apple. «jOBS», en la cual actúa Ashton Kutcher, se presentó en el festival de Sundance, sin embargo, aún no cuenta con fecha de estreno. Por su parte, Sony planea realizar una cinta basada en la biografía que escribió Walter Isaacson por Aaron Sorkin.