CIUDAD DE MÉXICO, 5 de septiembre.- La iniciativa de reforma laboral que envió el presidente Felipe Calderón al Congreso de la Unión no está hecha a modo de nadie ni protege intereses particulares, afirma Rosalinda Vélez Juárez. La secretaria del Trabajo llama a los legisladores a no desaprovechar la oportunidad histórica de cambiar y proteger la situación de los trabajadores mexicanos.
En entrevista con Excélsior, la funcionaria aclara que el presidente Felipe Calderón no intentó sorprender a nadie ni marcar el rumbo que el país debe seguir en materia laboral para los próximos años; pero sí pretende que con la figura de iniciativa preferente se obligue a los legisladores a discutir la propuesta: “Que voten como quieran”.
Si la discusión de la reforma laboral se atoró en el Congreso se debió, según la secretaria, a que los partidos evaluaron costos políticos y electorales; pero ahora les pide valorar el costo real que tiene para los trabajadores y para el país no modernizar una ley que tiene 42 años.
“Necesitamos avanzar en el marco normativo que hoy es francamente una camisa de fuerza que no permite crecer como sociedad, como país, ni crear mejores empleos”, dice.
Habla de las bondades de la propuesta: “La iniciativa prevé nuevas modalidades de contratación para mujeres, jóvenes y personas con discapacidad; fortalecemos la transparencia y democracia sindical; se regula el outsourcing; se establecen mecanismos para medir e incentivar la productividad.
“Hay un capítulo sobre minas que regula de manera específica el trabajo de los mineros para evitar accidentes; se introduce un listado sobre los empleos prohibidos para los menores y se dan mayores atribuciones a las Secretaría del Trabajo, como la posibilidad de clausurar un centro de trabajo que constituya un riesgo para el trabajador. Si un inspector se da cuenta del peligro, clausura y saca a los trabajadores en ese momento.
“Como secretaría necesitamos herramientas útiles que nos den fuerza para ejercer nuestras facultades; endurecer sanciones y tener multas más severas.”
Rosalinda Vélez charla sobre la iniciativa que el gobierno federal envió al Congreso el pasado 1 de septiembre. Llega a la sala de juntas, donde se desarrolla la plática, con un documento de trabajo de 22 páginas. Ahí se destacan los puntos novedosos de la propuesta gubernamental, se describen los objetivos y se incluye un comparativo con las propuestas que sobre el tema han presentado PRI, PAN y PRD.
La secretaria ha tenido días intensos de cabildeo de la iniciativa. Se reunió con líderes empresariales, sindicales, con trabajadores, representantes de partidos y legisladores para comunicarles la intención del Ejecutivo de que el periodo ordinario de sesiones arrancara con la iniciativa de reforma laboral.
—¿El presidente Felipe Calderón intenta marcarle al próximo gobierno el rumbo que en materia laboral debe tener el país? ¿Es un madruguete?
—Con la iniciativa preferente, el Ejecutivo está aprovechando una herramienta que se acaba de aprobar. Es obligarlos (a los legisladores) a entrar a la discusión de la reforma. Que voten como quieran, pero quiero ver quién vota en contra de no proteger los intereses de los menores trabajadores, de los jornaleros, de las mujeres y de los jóvenes.
Aunque hemos ido recuperando empleos (553 mil empleos hasta el mes de julio), hay una deuda de los Poderes Ejecutivo y Legislativo con la sociedad en materia laboral, y tenemos que producir más empleos de calidad, con mejores sueldos y combatir la informalidad.
Necesitamos avanzar en el marco normativo que es francamente como una camisa de fuerza. Es importante impulsar la productividad, la competitividad; avanzar en la equidad laboral para mujeres, jóvenes y personas con discapacidad. Nuestra ley no prevé la protección a las mujeres embarazadas ni equidad en los sueldos o una licencia de paternidad para que haya una corresponsabilidad de los hombres con las mujeres.
—¿A quién beneficia la iniciativa?
La iniciativa es seria, responsable y guarda un equilibrio entre los actores de la producción, entre los trabajadores y patrones. No es una iniciativa a modo de nadie, está pensada en las necesidades reales de nuestro país.
Es producto de la revisión y valoración de 497 iniciativas y va a tener que ser analizada por los legisladores, que son los que tienen la última palabra.
No hay una sola voz en contra de la reforma laboral y es una oportunidad histórica para los legisladores, no pueden desperdiciar la oportunidad de cambiar la situación de los trabajadores.
La reforma va a servir a cualquier gobierno, a quien dirija al país. Ya sabemos por dónde se tiene que caminar. Se ha estado platicando con legisladores, empresarios, líderes sindicales. No sorprende a nadie
Es una iniciativa que prevé las necesidades de los trabajadores y de los empresarios. Siempre habrá algo que le duela a uno o al otro, pero hay que buscar el equilibrio. A lo mejor a algunos empresarios no les va a gustar que le incrementen las multas, y a los líderes sindicales lo de la transparencia y a los trabajadores que les midan la productividad, pero es una cuestión de justicia y equilibrios.
—¿Confía en que la reforma cuente con el aval de los partidos representados en el Congreso, porque podrían no aprobarla?
—Existen muchos temas en los que se coincide, si se atoró la reforma en el Congreso fue más bien una cuestión de costos políticos, de tiempos electorales, pero ya los tiempos son otros y no tenemos que valorar costos políticos, sino el costo que tendría para los mexicanos, para los trabajadores el no aprobar la reforma laboral.
Con la iniciativa preferente no hay riesgo de que la reforma caiga en la congeladora, pues según el proceso legislativo, la Cámara de origen tiene 30 días naturales para dictaminarla, si no lo hace, pasa al Pleno y en la siguiente sesión (pasados esos 30 días) se discute y se vota.
La secretaria del Trabajo destaca que en el capítulo de minas se establece la prohibición expresa del trabajo en los pozos de carbón, pues la mayor parte de los accidentes suceden ahí en los tiros verticales. “El patrón que meta a una persona al pozo va a tener problemas, sanción con cárcel”, dice.
Sobre la transparencia sindical, Rosalinda Vélez explica que la iniciativa busca que los trabajadores tengan el derecho de exigir información a sus dirigencias sindicales sobre el uso y destino de sus cuotas. También se considera la democracia interna y el voto secreto.
En materia de huelga, señala, el sindicato tendrá que demostrar que efectivamente tiene el respaldo de todos los trabajadores para suspender las labores.
Rosalinda Vélez describe las nuevas modalidades de contratación: a prueba, de capacitación, de temporada y teletrabajo, que permitiría emplear a los jóvenes, mujeres —que también tienen responsabilidades en el hogar— y personas con discapacidad. La idea es que tengan las prestaciones de ley y acumulen antigüedad y experiencia.
La secretaria aborda uno de los temas polémicos: la subcontratación (outsourcing). “Actualmente existe sin ninguna protección para los trabajadores, por eso hay que regularlo, ponerle candados para que no se abuse”.
La funcionaria subraya que las tres principales fuerzas políticas han incluido el tema en sus propuestas de reforma laboral. Y la idea es que se regule para que existan límites, forma de repartir responsabilidades y los trabajadores no se queden desprotegidos.
“Queremos que entre en la formalidad, que no se explote, no se abuse de la gente.”
Propuestas
Planteamientos novedoso en la iniciativa del presidente Calderón.
1.- Nuevas modalidades de contratación con salario, prestaciones, seguridad social y antigüedad:
Contratos a prueba: De 1 a 6 meses y permite que los patrones conozcan las aptitudes de los jóvenes.
Contratos de capacitación inicial: De 3 a 6 meses, que pulen al trabajador y establece un pago igual que el que percibe un empleado de base que desempeña el mismo puesto.
Contratos de temporada: Por día, semana o mes. Beneficia a jóvenes que estudian, mujeres con tareas del hogar y a aquellos que necesiten flexibilidad de horario.
Teletrabajo: Trabajo en domicilio con todas la prestaciones de la ley. Permite utilizar los medios informáticos, computadoras, para desarrollar el trabajo desde la casa.
2.- Menores trabajadores:
Se introduce un listado sobre el trabajo prohibido para los menores. Hay más de 32 trabajos que no deben realizar los menores de 16 y 18 años.
Se tipifica como delito el que un patrón contrate a un menor de 14 años.
La iniciativa se acompaña de una tabla de enfermedades, donde se enlistan los padecimientos relacionados con la actividad laboral y se agilizan los juicios.
3.- Licencias de paternidad:
Se reconoce la licencia de paternidad de 10 días con goce de sueldo.
4.- Trabajo en minas:
Tipifica como delito y multa la omisión en las medidas de seguridad que produzca la muerte de un trabajador
Prohíbe el trabajo en pozos
Obliga al patrón a contar con planos y a dotar a los trabajadores de equipo de protección personal.
5.- Transparencia y democracia sindical:
Reconoce el derecho de los trabajadores a solicitar información a la dirigencia sindical sobre la administración del patrimonio gremial.
En sindicatos mayores de 150 miembros, la reforma prevé la obligación de dictaminar anualmente los resultados de la administración del patrimonio sindical por un auditor externo.
6.- Outsourcing
Se regula la subcontratación que en la actualidad opera, porque no está reglamentada.
Con la reforma se exige contrato por escrito; se establece la responsabilidad solidaria de patrones (beneficiarios) e intermediarios (contratistas) en las obligaciones contraídas con el trabajador; define y sanciona la subcontratación dolosa.
7.- Productividad
Se introducen fórmulas para incrementar y medir la productividad de los trabajadores, a fin de lograr el crecimiento empresarial.
8.- Atribuciones para la STPS
La propuesta faculta a la Secretaría a clausurar centros de trabajo cuando exista peligro inminente para la vida o salud.
Propone incrementar los montos máximos de las sanciones por infracciones a la ley.