Llaman a no boicotear visita papal al Senado

*Aseveran que se le convoca en su calidad de jefe de Estado; esperan que hable sobre derechos humanos, cambio climático, seguridad y paz…

CIUDAD DE MÉXICO.
El Pleno del Senado aprobó por unanimidad invitar formalmente al papa Francisco a hablar ante el Pleno, durante su visita de Estado a México, pues están interesados en escuchar su mensaje, como líder político, en torno a problemas como la paz, la seguridad, el cambio climático, la promoción y defensa de los derechos humanos y el restablecimiento de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba.

En entrevista, el presidente del Senado, Roberto Gil, consideró que nadie debe boicotear este encuentro entre un líder de Estado y el Senado, luego de que Excélsior informó que los obispos mexicanos no quieren que Francisco hable ante los legisladores federales.

“Yo creo que no debiera haber esa oposición por parte de nadie (…) No estamos invitando a su santidad el Papa en su calidad de líder espiritual, sino que estamos invitando al Papa en su calidad de jefe de un Estado que México ha reconocido y que forma parte de la comunidad internacional”, explicó Roberto Gil Zuarth.

Añadió que “el Senado de la República, en su calidad de órgano vigilante, supervisor, controlador de la política exterior mexicana, desea dialogar con el representante de un Estado, con el representante del Estado Vaticano, con el Jefe del Estado Vaticano.

“No es una invitación que tiene como propósito resaltar o subrayar la condición de líder espiritual de su santidad, sino la condición de jefe de un Estado que México reconoce”, insistió el presidente del Senado.

La víspera, Excélsior informó que el subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos, de la Secretaría de Gobernación, Humberto Roque Villanueva, no “veía” al Papa en una visita formal ante el Pleno del Senado, amén de que el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano, el obispo Eugenio Lira, consideró que el Papa no debe estar en el Senado.

Interrogado sobre estas posiciones en contra, Roberto Gil precisó que “nosotros lo hacemos en el mejor ánimo de no solamente escuchar a su santidad el Papa, sino también de poder intercambiar con él puntos de vista con respecto a la agenda de desarrollo global, de desarrollo sustentable de lucha contra la desigualdad, que el propio Papa ha puesto sobre la mesa.

“Recientemente lo hemos visto en el Congreso de los Estados Unidos, en un discurso en el que ha señalado los pendientes que tienen nuestras naciones, que tiene la humanidad para generar prosperidad, para corregir las injusticias, y precisamente queremos que el Papa venga a México para hablar con los políticos, con la representación popular del pueblo mexicano y que podamos juntos construir y apoyar esa agenda contra la desigualdad, el desarrollo y el combate a la pobreza”, dijo.

El acuerdo aprobado por el Pleno recuerda que siempre se ha brindado un trato digno y respetuoso a los jefes de Estado y que el Senado tiene el mandato constitucional de corresponsabilidad en materia de política exterior.

Así, mandata a su presidente, Roberto Gil, para realizar las gestiones necesarias, en coordinación con el Ejecutivo Federal, a fin de procesar la invitación oficial.

No tenían prevista la asistencia

El arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, afirmó que los legisladores están “apreciando y valorando mucho que el Papa los visite, ya que esperan una palabra de iluminación, una palabra que pueda ayudar a que cumplan mejor con su misión con el pueblo”.

Confirmó que la CEM no incluyó en la propuesta de itinerario en México que enviaron al Papa, la intensión del Congreso por recibirlo.

“No se tenía conocimiento oficial, se sabía que estaba pensándose una propuesta de que el Papa los visitara, no lo contemplamos porque no había invitación formal”, explicó.