La necropsia de ley que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) practicó a los cuerpos de Hugo Sánchez Portugal y de otra persona —de quien la dependencia no ha revelado de manera oficial su identidad— arrojó que los cadáveres que se encontraron dentro del departamento ubicado en la calle de Arquímedes, número 225, colonia Polanco, delegación Miguel Hidalgo, murieron por inhalación de gas del boiler instalado dentro del departamento, porque la ventilación estaba obstruida.
Destaca que en los peritajes realizados a las víctimas no se encontraron huellas de violencia, forcejeo o incluso robo, pues —al revisar el inmueble— todas sus pertenencias estaban en orden y no faltaba ni dinero ni cosas de valor.
En la mañana del sábado se reportó el hallazgo del cuerpo sin vida del hijo del futbolista Hugo Sánchez y de otro joven.
Desde un principio, la PGJDF reportó que la muerte pudo ser por intoxicación de monóxido de carbono, pues no había indicios de robo, esta versión fue confirmada por la policía de investigación. Sánchez Portugal es velado en una funeraria del sur de la ciudad.
No quiso declarar. Más de 13 horas después de hacer los trámites pertinentes, cerca de las 4:00 de la madrugada del domingo, el cuerpo de Sánchez Portugal llegó a una funeraria al sur de ciudad de México para el velorio, que encabezó su padre, Hugo Sánchez, quien llegó de Estados Unidos donde radica, recibió el pésame de personalidades del deporte nacional.
El pentapichichi, que llegó la tarde del sábado procedente de San Diego, California, ingresó por la puerta trasera para evitar a los medios de comunicación.
Hugo Sánchez bajó solo cargando una mochila; se metió sin emitir ninguna palabra, portando unas gafas negras que no permitió ver el dolor y lágrimas, que según testigos, brotaron al momento de ver el cuerpo de su hijo mayor dentro del féretro.
En el lugar se dio a conocer que la última morada, del también jugador y bicampeón con los Pumas, sería el Panteón Español.