Obispo mexicano confiesa que tiene 2 hijos; renuncia a su cargo

El Vaticano autorizó la salida de Gabino Zavala, originario del estado de Guerrero, quien fungía como obispo auxiliar de Los Angeles

EL VATICANO, 5 de enero.– El papa Benedicto XVI aceptó la renuncia del obispo auxiliar de Los Ángeles, California, monseñor Gabino Zavala, de 60 años y origen mexicano, quien confesó ser padre de dos hijos, informó el Vaticano.

Zavala nació el 7 de septiembre de 1951 en el estado de Guerrero, México, pero creció en Los Ángeles y fue ordenado sacerdote el 28 de mayo de 1977.

“La arquidiócesis se puso en contacto con la madre y los niños para ofrecerles atención espiritual y económica, para ayudar a los niños con los costos de su educación.”, indicó el arzobispo de Los Ángeles, José H. Gómez, en una carta enviada a su arquidiócesis.

Se desempeñaba como obispo auxiliar de esa arquidiócesis desde 1994. El arzobispo explica asimismo que desde que Zavala le comunicó la existencia de esos dos hijos, a principios de diciembre, fue apartado de su ministerio y, a partir de ahora, “vivirá de modo privado”, fuera de la escena pública.

Ocupaba también el cargo de presidente de Pax Christi USA, movimiento católico a favor de la paz, y era un religioso muy comprometido en la lucha contra la pena de muerte en Estados Unidos y en defensa de los derechos de los inmigrantes.

La renuncia anticipada del obispo Zavala fue aceptada por el Papa según el código de derecho canónico 411 y 401.2, precisa en un breve comunicado la oficina de prensa de la Santa Sede.

Con tales códigos se establece la dimisión de un religioso de su cargo “por motivos de salud o graves”.

Según la agencia católica de noticias Catholic News Service, el obispo Zavala confesó recientemente a sus superiores que tenía dos hijos adolescentes, por lo que se disponía a presentar su renuncia.

La renuncia de Zavala es la última de una serie de escándalos en esa arquidiócesis de Los Ángeles que en 2007 alcanzó un acuerdo extrajudicial para pagar 660 millones de dólares a víctimas de abuso sexual por sacerdotes pederastas.