Prepara alcalde homenaje a Cassez

PARÍS.— Cuando en las próximas horas Florence Cassez llegue a Dunkerque, la localidad del noroeste de Francia en la que viven sus padres pero en la que ella nunca residió, podrá ver decenas de carteles de todos los tamaños con una enorme fotografía suya bajo el lema “Florence Cassez. Bienvenue dans tan ville (Florence Cassez. Bienvenida a tu ciudad)” pegadas por todas las calles y colocadas en las marquesinas de los autobuses de la ciudad.

Es el pequeño homenaje que el alcalde, Michel Belaberre, ha querido prepararle y que, sin embargo, ha sido criticado por algunos vecinos, que lo consideran un gasto innecesario en un momento en el que las cifras de desempleo superan los 3 millones de personas en Francia.

El regente de dicha ciudad portuaria situada en la región de Norte-Paso de Calais, a apenas 10 kilómetros de la frontera con Bélgica, está feliz con el regreso de la joven y al igual que muchos de sus 70 mil habitantes, está convencido de su inocencia. “Estamos muy felices de saber que pronto va a volver a estar con nosotros. Ha sido muy largo todo el tiempo que ha estado en la cárcel y estamos nerviosos ante su regreso”, aseguró a través de un comunicado.

“Ella es una mujer muy fuerte y con mucho carácter que ha sabido soportar con mucha valentía todos los años que ha estado presa, así que ahora estamos impacientes por verla y deseando poder ayudarla en todo lo que necesite para que rehaga su vida”, añadió.

El alcalde, que viajó a México para visitar a Cassez en la cárcel de Tepepan en diciembre de 2010, le ha preparado una fiesta homenaje para la semana que viene, aunque todavía no hay nada concreto a la espera de que la joven llegue y puedan acordar las actividades juntos. Y también ya ha anunciado su intención de nombrarla “Ciudadana de honor”, “si ella quiere”, como se ha apresurado a reconocer.

Asimismo la semana que viene se celebra la fiesta de Carnaval, una de las más famosas del país, a la que ya ha invitado a Florence.

Sin embargo, estas iniciativas del regente no han sentado muy bien a algunos vecinos. La página web del diario más importante de la región La voix du Nord (La voz del norte), publicaba ayer algunas opiniones contrarias al recibimiento preparado para Cassez. “Cada semana un póster de estos cuesta 2 mil euros. Un dinero que el alcalde debería dedicar a crear puestos de trabajo en lugar de a estas cosas”, decía Khalil B en referencia a las pancartas colocadas sobre los anuncios de publicidad. “Ella no ha hecho nada para hacerse rica y famosa con nuestros impuestos”, denunciaba Daniel K. ante el anuncio hecho por el alcalde de ofrecerle un puesto de trabajo. “Todo esto es un circo mediático mientras 2 mil franceses continúan presos en cárceles en el extranjero y nadie se ocupa de ellos”, lamentaba Jean Marak D.

Al igual que el alcalde también sus vecinas del barrio de Malo-Les Bains, donde los padres de Florence viven en un edificio de dos plantas al que se mudaron hace tres años, están deseando conocerla ya que Florence nunca vivió allí sino que nació y creció en Béthune.

Aunque todas las vecinas coinciden en que los primeros días la van a dejar tranquila. “Vamos a dejarla respirar, que disfrute primero de su libertad y de su familia. Y luego ya podrá hacerlo con nosotros”.

Además, el profesor de guitarra del conservatorio de arras, una localidad cercana a Dunkerque, Fred Alan Ponthieux, que creó una plataforma de apoyo a Florence en internet: “United Artist for Florence Cassez” también está preparando una exposición con otros artistas franceses en honor a la joven, quien desde la cárcel de Tepepan mandó numerosos cuadros que fueron expuestos en Francia durante su cautiverio.

Apoyo a la distancia

Desde que se conoció que Florence Cassez había sido detenida en México en diciembre del año 2005, el ayuntamiento de Dunkerque le mostró su apoyo a ella y a su familia.

Y para no olvidarla lo primero que hicieron fue colocar una imagen de Florence en la cárcel bajo el lema “Libérez Florence Cassez!” (“Libertad para Florence Cassez”) detrás de la rejas en la cárcel en México como muestra de apoyo. Hoy la esperan impacientes.