Por Paty Aguilar
Totalmente fuera de juicio, el estilista, Aristeo Hernández, creyéndose dueño de la plaza cívica de Valle Dorado, luego de que el alcalde, de manera irregular le rubricó un oficio con el nombramiento de director del Centro de Primera Atención a la Violencia Familiar y administrador de dicha plaza, se apropió de la Bandera que recientemente la Dirección de Educación, Cultura y Deportes, de manera oficial entregó a la delegación, desde ese día, sin ser autoridad, y sin tomar en cuenta al delegado, y con la anuencia de Paniagua, Aristeo Hernández, tomó esta Bandera y la puso bajo su custodia dentro del edificio del Centro.
Ante esta situación, el delegado, Jesús Chávez, apabullado por Paniagua y esta gente, se vio en la necesidad de solicitar a Aristeo Hernández, mediante oficio, tuviera a bien izar la Bandera para la celebración de los días patrios, 15 y 16 de septiembre 2011. Sin embargo, luego del altercado que se dio entre el delegado y este personaje por el uso de esta plaza para los festejos, se hizo caso omiso al oficio, y simple y sencillamente, el Lábaro Patrio, no fue izado tal y como lo demanda la ley federal en la materia.
El caso es que se llevó a cabo el desfile conmemorativo del Día de la Independencia, donde participaron las escuelas de esta delegación, preescolar, primarias, secundaria y CONALEP, pero grande fue la sorpresa de los profesores cuando arribaron a la plaza y la Bandera no estaba en el asta de la plaza cívica donde se llevó a cabo los Honores a la Bandera.
Ante esta situación, luego del acto oficial, el profesor, Rubén, quien fungió como maestro de ceremonias, dio una amonestación pública a quienes tenían la Bandera en su poder, manifestándoles que lo que habían hecho había sido incorrecto. Al término del acto oficial, se acercó al profesor, la señora, Thelma Osuna, quien fungía como secretaria del centro de Atención, para ofender al delegado delante del profesor. Luego, el delegado, tras advertirle a dicha señora que se abstuviera de sus ofensas so pena de mandar detenerla, se encaminó al edificio que alberga dicho centro, y le pidió al policía de guardia, le entregara el Lábaro Patrio, mismo que en ese momento fue izado. Mientras esto sucedía, la insubordinada mujer, le dijo al delegado que le valía madre.
Lo que pudo haber sido un hermoso acto cívico con la Bandera a toda asta en la plaza más grande del municipio, esta gente insurrecta, provocó esta desagradable situación faltando al respeto al acto cívico más importante de nuestro país. Sin embargo, el desfile resultó muy festivo, los estudiantes participaron entusiastas y el trabajo de los profesores se vio reflejado, esfuerzo que fue agradecido por los padres de familia. Cabe mencionar, que destacó el trabajo del profesor de grupo, Eduardo Montoya, de la primaria Octavio Paz turno vespertino, quien ensayó la escolta de esta escuela, la cual pulcramente vestida, marchó de manera disciplinada y con gran orgullo portó el Lábaro Patrio.