* Bello mensaje les dio la presidenta del DIF de BadeBa
* Se presentaron y cantaron las gotitas de Oromapas
* Peter Pan, los niños indios y el temible pirata Garfio
Bahía de Banderas
Con la sensibilidad que ha demostrado la señora Martha de Paniagua como presidenta del DIF de Bahía de Banderas, se festejó ayer en el lienzo charro de San Juan de Abajo, la fiesta del “Día del Niño” reuniéndose un poco más de 22 mil niños de todo el municipio.
Fue una fiesta espectacular, gradas y todo el ruedo lleno de sillas fue llenado y rebasado por la cantidad de niños, muchos de ellos acompañados por sus padres, que disfrutaron por igual del ambiente.
La comunicación fue perfecta entre los niños y el espectáculo que se presentó, que fue diverso. Los payasitos Petunia, Pitaca y Petacón, actuaron para dar una lección sobre estudiar, trabajar y ser mejor.
Hermoso mensaje
La señora Martha de Paniagua, en su mensaje, dio a conocer a los miles de niños que esta fiesta espectacular tiene su origen en la buena disposición del gran equipo de regidores que encabeza su esposo Héctor Paniagua.
“Sin la buena voluntad de todos ellos, dijo, no hubiera sido posible hacer esta fiesta del “Día del Niño”. Esto, porque todos los que asistieron, un poco más de 22 mil, recibieron un regalo y un bolo.
A la entrada se hicieron dos filas, por las que entraron una las niñas y otra los niños y al paso por las mesas de los regalos, recibieron juguetes y bolos con muchos dulces y golosinas.
Los regalos apropiados para niñas y niños, espléndidos pues no se escatimaron en la calidad y en el precio y fueron apropiados según la edad de los que pasaron por este lugar.
En la recepción, personal del DIF con vestimentas muy apropiadas, mostraron por igual ese sentimiento tan grande de ver felices a todos los niños.
El espectáculo transcurrió en armonía y con estrecha vigilancia para que hubiera orden. Esto, cuando se trata de niños, es muy delicado. Elementos de seguridad pública, personal del DIF y voluntarias de la Preparatoria de San Juan de Abajo, hicieron posible este orden que se vivió toda la tarde, tanto a la llegada que fue tumultuosa, como en la salida…
La tarde fue perfecta, sin mancha y todos los niños vivieron felices el espectáculo, sobre todo quienes tuvieron la fortuna de llevarse a su casa una bicicleta, que fue el plus de esta gran jornada en San Juan de Abajo.