Es inadmisible escudar el delito de trata de personas en la aberrante práctica de los usos y costumbres, aseveró el coordinador de Asuntos Jurídicos del Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), Pablo Navarrete Gutiérrez.
En el marco del Foro Nacional contra la Trata de Personas, que se llevó a cabo en la ciudad de Oaxaca, el funcionario federal señaló que las autoridades locales que no aceptan la existencia de la trata de personas no tienen información suficiente, por lo que es importante trabajar de manera coordinada a fin de que las autoridades locales se sensibilicen respecto a este fenómeno.
Recordó que en el pasado mes de abril, el presidente Felipe Calderón se sumó a la campaña de Naciones Unidas denominada Corazón Azul, con lo que comprometió al gobierno federal a combatir este flagelo de la esclavitud moderna, tercer delito más redituable en el mundo, después del tráfico de armas en el país.
Por su parte, Sara Irene Herrerías Guerra, fiscal especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas de la PGR, se pronunció por crear canales de confianza desde las instancias estatales, mecanismos de protección a las y los denunciantes y especial atención a la prevención mediante la atención de grupos vulnerables, de los cuales las y los adolescentes de clase media han surgido entre las nuevas víctimas, ya que son enganchadas y enganchados a través de las redes sociales.
Esta situación, explicó, hace más complicado dar seguimiento e investigar, pues la niña o el niño salen de casa tras el proceso de seducción que su captor cibernético realizó.
En tanto, la diputada Rosy Orozco, presidenta de la Comisión Especial contra la trata de personas del Congreso de la Unión, señaló que el enemigo número uno en el combate a la trata de personas es la impunidad.
Por dicho motivo, se pronunció por el incremento de penas y por el castigo a todos los que intervienen en esta cadena delictiva, como enganchadores y consumidores.
Finalmente, Stela Fraginals Aguilar, directora del Instituto de la Mujer Oaxaqueña, comentó la necesidad urgente para que en los Congresos de los estados se incorpore una Comisión de Atención a la Trata de Personas.