*“Llegar a la playa del amor en las Islas Marietas, era como en la película Titanic, solamente ves puros cuerpos flotando”, relatan turistas a especialistas e investigadores…
Por Mauricio Lira Camacho
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La Voracidad de Prestadores de Servicios Turísticos y Corrupción de Autoridades, acabaron con la playa del Amor, en la Islas Marietas.
“Llegar a la playa del amor en las islas Marietas, era como en la película de Titanic, solamente ves puros cuerpos flotando”.
Una anécdota relata también que una pareja de japoneses, tenían la ilusión de casarse en la isla del amor, tal y como se había estado publicitando en el gobierno de Nayarit, como un paraíso solitario para ocasiones especiales.
Así vieron las imágenes estos turistas en Japón.
Planearon e hicieron el viaje hasta Nuevo Vallarta, fueron recibidos por un prestador de servicios turísticos, quien los llevó hasta el lugar.
Sin embargo, para la muchacha extranjera fue una enorme desilusión, debido a que la playa siempre estuvo repleta de gente, ningún espacio vacío.
Era un ir y venir de embarcaciones y de gente con chaleco estancada en las inmediaciones de las islas marietas, “no fue lo que esperaban”, relató a este medio el encargado de haberlos llevado.
Como estas son varias historias, que ilustran la saturación y masificación social a este emblemático lugar en Nayarit.
Cabe destacar que, en el período vacacional de semana y santa, lo que derramó el vaso, fue la gran cantidad de turistas quienes se dieron cita, transportados en embarcaciones diversas, lo que saturó y sobre pasó las medidas previamente establecidas para no afectar la zona.
Un lugar que presenta ya un coral color blanco, provocado por contaminación y que, a decir de expertos que trabajan de la mano con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, CONANP, lo que encuentran a diario, son “ligas para el pelo, monedas, anteojos, comida y basura en la superficie y fondo del mar”.
Para determinar el cierre temporal de la isla del amor en las islas Marietas, jugaron dos factores esenciales, por un lado, la voracidad de prestadores de servicios turísticos que, a sabiendas de cumplir con una serie de lineamientos, nunca cumplieron.
Como son las medidas mínimas de seguridad, el número establecido de pasajeros en las embarcaciones y el propio número de éstas para llegar a las islas, además del correcto uso de brazaletes, del cual, en este último caso hubo hasta mercado negro, pues los reutilizaban sin control alguno.
El segundo factor es la corrupción imperante en dependencias federales, principalmente de las secretarías del medio ambiente y de protección al medio ambiente, que permitieron estas anomalías ocurrieran, dejar que las embarcaciones cargaran un número mayor de turistas que el permitido, que no se respetara el acercamiento de las embarcaciones a la propia isla y la saturación en el lugar.
Un tercer factor, tiene que ver con la falta de presupuesto del gobierno federal para realmente conservar esta área, ya que un solo cuidador de estas islas, tiene que hacer todo el trabajo de inspeccionar, “y eso cuando el motor de la única embarcación funciona”.
Nadie respeta un horario de visita a las islas que es de 8 de la mañana a las 6 de la tarde, y lo que se había estimado de afluencia a las islas se fijó en 625 personas, un total de 424 para practicar lo que se conoce como snorquer y los demás para diversas prácticas.
En la pasada temporada, se rompieron las barreras en el cumplimiento de lo que se debe hacer para no destruir el área de la playa del amor y las islas marietas.
De acuerdo con el investigador doctor, Amilcar L. Cupul Magaña, todos los sectores quienes tienen que ver con la industria habrán de reunirse a finales de este mes, con el objetivo de determinar en cuanto tiempo habrá que reabrirse, bajo otras condiciones, la isla del amor en las marietas.
Quizá deban solicitarse más fondos para por lo menos no haya una sola persona que cuide, renovar embarcación de vigilancia, establecer una tarifa mayor a la actual para que parte de los recursos que ingresan por los conceptos de ingresar a las islas se queden para protección del lugar, por ejemplo.
Dijo que era increíble observar, si el tope de visita era de 625 personas al lugar, en realidad el registro era de 2, 500 turistas por día.
Es necesario el cierre temporal del sitio, en este tiempo se tomarán medidas para mejorar el área, pero bajo otras acciones de control, dijo el doctor Cupul.
Sobre el tiempo que deberá permanecer cerrada la playa, a estas alturas se desconoce, pero se debe tomar en cuenta algunos puntos de restauración de las marietas, que pudiera llevar – sin confirmar-, posiblemente todo este año.