*Otra calle más que en la práctica, solamente sirve para beneficiar al gremio de los taxistas…
Por Mauricio Lira Camacho
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La calle Uruguay fue habilitada para beneficiar al peatón y al Teatro del Puerto, pero hoy en día únicamente favorece al gremio de los taxistas.
Dicha vialidad, tuvo su reacondicionamiento en el gobierno del priista, Salvador González, toda vez que tenía como propósito tener de dos un solo carril, debido a que el inmueble ubicado en la esquina fue habilitado como Teatro del Puerto.
Dejaron solamente un carril para un tránsito lento, seguro para que automovilistas se movilicen de un lado a otro, sin interferir el movimiento en el Teatro.
Pero hoy se ha convertido en un lugar obstruido por la estancia de varios taxistas, quienes tienen ahí su sitio.
Vehículos que están a la espera de usuarios que entran y salen de la tienda comercial Ley, los que son transportados a distintas colonias del municipio.
El tema de los sitios de taxis, está muy cuestionado debido al exagerado número que tienen en el centro del puerto.
En algunos casos, como en la calle Galeana, toda la arteria para el gremio y todo el tiempo sin ocupar.
La crítica se basa en el número creciente de unidades de taxis, cuyos choferes se la pasan mucho tiempo sin hacer nada, solamente a la espera de clientes.
Los sitios que están de más y la falta de mercado, porque muchos de los pasajeros que visitan el primer cuadro de la ciudad, se transporta mediante autos o camionetas que salen de la administración portuaria integral, API, camionetas y camiones rentados a guías de turistas y el viajero nacional que deja sus autos en los hoteles, para tomar el autobús urbano.
En el caso de la calle Uruguay, el objetivo era claro para uso exclusivo de peatones y de ciertos automovilistas interesados y con la necesidad de cruzar de una arteria a la otra.
El haber reducido el carril, solamente benefició al sitio de taxis que recibió el beneficio para estacionar ahí sus unidades.