Terroristas también lo han intentado, afirma el INM
MÉTODO. El INM asegura que cuenta con apoyo de la Interpol para identificar documentos robados y extraviados que frecuentemente son usados por criminales para cruzar fronteras internacionales. En imagen de 2011, un funcionario de la SRE examina la validez de un pasaporte.
Las autoridades migratorias mexicanas han detectado en los últimos años el intento de terroristas e integrantes del crimen organizado por ingresar al país mediante la suplantación de identidad, cambiando su fisonomía para parecerse a los titulares de documentos de viaje, como pasaportes, reveló Emmanuel Guevara Isla, funcionario del Instituto Nacional de Migración (INM).
El director general adjunto de Información e Investigación Migratoria del INM, al participar en la Conferencia Internacional sobre el Tráfico Ilícito de Migrantes, reconoció que se han incrementado los casos de suplantación en los cuales los responsables incluso se someten a cirugías para cambiar e intentar ingresar al país con documentos oficiales, adquiriendo la identidad del titular legal.
Durante la mesa redonda Medidas de control de documentos a fin de detectar migrantes objeto de tráfico ilícito y operaciones de grupos delictivos organizados, Guevara Isla destacó que desde 2008 se han reforzado las acciones para detectar la falsificación y alteración de documentos de viaje, así los casos de suplantación de identidad.
Estas acciones, dijo el funcionario, han permitido determinar que “los casos se han incrementado. Hemos detectado algunos relevantes, como el de personas vinculadas al terrorismo y al crimen organizado, a los que se les impide el ingreso”.
Aunque rechazó dar una cifra sobre el número de suplantaciones detectadas y ejemplos concretos, “se trata de información clasificada como reservada, pues están en investigación”, explicó, aunque de acuerdo con los protocolos que se siguen, se ha notificado a la Interpol y a los países donde hay órdenes de aprehensión contra estos sujetos sobre su intento de ingresar a México.
Cambios de fisonomía
Guevara Isla detalló que ha aumentado la habilidad de los diversos agentes de la delincuencia organizada para hacer que una persona sea casi idéntica a la legal titular del documento de viaje, “en este caso, gente que incluso puede tardar hasta dos años para cambiar su fisonomía con el fin de parecerse al titular de un documento original y válido”.
Explicó que “hay casos en los que se someten a cirugías, cambios de peso, hacen lo imposible para parecerse al titular legal del documento de viaje, son los que más nos preocupan, porque la gente puede ser idéntica a la imagen que aparece en el documento oficial y éste reúne todos los requisitos de seguridad; así la detección se vuelve más complicada”.
El funcionario del INM destacó que es importante la colaboración de la Interpol, que cuenta con una amplia base de documentos robados y extraviados “que frecuentemente son utilizados para el cambio de las características morfológicas de quienes pretenden cruzar fronteras internacionales”.
Comentó que detectar este tipo de ilícito es clave, ya que uno de los propósitos “es resguardar la seguridad pública y la seguridad nacional mediante la detección de personas cuya internación tenga fines que sean lesivos para el país”.
Hace cuatro años, el INM creó un laboratorio de análisis de documentación y dactiloscopia para fortalecer la seguridad nacional, ya que permite detectar los documentos falsos, los alterados y la suplantación.
El edificio cuenta con equipo forense para comparar imágenes y verificar las características de seguridad de un documento, así como para realizar los peritajes necesarios para descubrir los cambios de identidad.
El funcionario detalló que, de 2008 a la fecha, el INM ha detectado 3 mil 399 documentos apócrifos, alterados o que son utilizados para suplantar identidad, con los que se ha pretendido ingresar al país.