* Esta entrevista se la concedió al periodista Julio Scherer, quien logró llegar hasta uno de los narcotraficantes más buscados de México y EU. Asegura que el Gobierno de Felipe Calderón tiene poca ventaja en la lucha contra el narcotráfico.
Agencias/ La guerra emprendida por el Gobierno contra el narcotráfico “está perdida” porque “el narco está en la sociedad, arraigado como la corrupción”, afirma Ismael Zambada, uno de los líderes del cártel de Sinaloa, en un encuentro con el veterano periodista mexicano Julio Scherer.
“El problema del narco envuelve a millones” y los reemplazos de los capos “ya andan por ahí”, agrega El Mayo Zambada, reveló ayer el semanario Proceso.
Por la captura de Zambada, el gobierno mexicano ofrece 2.3 millones de dólares de recompensa.
La portada de Proceso, que comienza a circular al público a partir de hoy, luce una fotografía en la que aparece Scherer junto a El Mayo, como testimonio de este encuentro en un lugar no revelado.
Este hombre robusto, amigo y compadre de Joaquín El Chapo Guzmán, el principal líder del cártel de Sinaloa, tiene 60 años, 1.80 metros de altura y lleva más de 40 años metido en el narcotráfico. Reconoce que tiene “pánico” de que lo encierren y preguntado sobre si se quitaría la vida si lo atrapan dijo: “No sé si tuviera los arrestos para matarme. Quiero pensar que sí, que me mataría”.
También admitió: “Cargo miedo” todo el tiempo, y dijo que cuatro veces el Ejército mexicano ha estado cerca de él.
Tan cerca como “arriba de mi cabeza. Huí por el monte, del que conozco los ramajes, los arroyos, las piedras, todo”. “A mí me agarran si me estoy quieto o me descuido (…) Para que hoy pudiéramos reunirnos, vine de lejos. Y en cuanto terminemos, me voy”, le dijo a Scherer, quien explica que el encuentro fue a petición del capo.
También confiesa que El Chapo y él son amigos y compadres y que hablan “por teléfono con frecuencia”. Califica como “tonterías” que la revista estadounidense Forbes incluya a El Chapo en la lista de los millonarios del mundo. (EFE)