• En estado de ebriedad no quiso que le hicieran el examen de alcoholemia, fue esposado y pidió que lo comunicara con Salvador González su alcalde amigo
Por Mauricio Lira Camacho
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Buck Emini, de 34 años de edad, empresario extranjero de bienes raíces, radicado en Punta de Mita, Nayarit, amigo del presidente municipal, Salvador González, cayó en estado de embriaguez, durante el programa alcoholímetro aplicado este pasado fin de semana.
Su estado, derivado del consumo excesivo de alcohol, era evidente, sin embargo, no quiso que le aplicaran el examen de bebida embriagante para determinar cuántos grados llevaba en su cuerpo.
De inmediato, quiso hacer una llamada telefónica, de quien dijo, es su amigo Salvador González.
Uno de los agentes no se lo permitió, ya que primero debían practicarle el examen de alcoholemia.
En un marcado tono extranjero, gritó, “arrest me, arrest me”.
Durante un intercambio de comentarios en inglés con un elemento de la subdirección de tránsito, “fue esposado y no se le permitió de primera instancia realizar alguna llamada”.
Fue sentado con el médico legista para determinar su situación.
Cabe destacar que antes de su arresto alcanzó a marcar un número desde su teléfono celular.
Pero no le contestaron, posteriormente le colocaron unas esposas en sus manos y fue colocado en una silla.
En ese momento estaba solo, portaba una camisa tipo sport y un saco informal.
Del interior en una de sus bolsas sonaba el repiqueteo de un teléfono celular.
Pidió a los presentes que alguien contestara la llamada, debido a que él no podía, pues sus manos las tenía esposadas y detrás de su espalda.
Gritaba: “please somebody take mi phone, is Chava… is Chava..”.
Alguien le preguntó: Who is Chava.
Y contestó ya en un español marcado con tono extranjero: El presidente municipal, es mi amigo … please take my phone, please…
Nadie lo hizo.
Hasta que llegó una amiga que lo acompañaba en el auto.
Ella contestó el teléfono, y le comentó era José Luis Díaz Borioli.
Minutos más tarde, le soltaron las esposas de las manos y regresó la llamada al director de turismo municipal.
El funcionario llegó 30 minutos después y enterado del caso por parte de agentes y del subdirector, Gustavo Ulloa, no intervino a favor en el asunto de la detención del empresario.
José Luis Díaz Borioli fue muy claro, “el señor viene en estado de embriaguez, deberá pagar como todo ciudadano su multa pues está infringiendo el reglamento y su auto deberá ir al corralón, aquí debe ser parejo a todos el programa sino que chiste”.
El empresario sacó su cartera pero no traía dinero sino tarjetas de crédito, finalmente le prestaron en efectivo, pagó la multa y su auto fue conducido al corralón.
Él conducido a su casa en Punta de Mita.
Borioli se despidió de los presentes no sin reiterar que este programa es de prevención y si la gente va en estado de embriaguez, debe pagar multa y su coche al corralón, no debe haber preferencias.